Alavés-Villarreal

Marcelino: «Preveo un partido tremendamente igualado»

El Alavés-Villarreal será una especie de partida de ajedrez, pero de alto voltaje. Movimientos de piezas estudiados al milímetro, pero con intensidad. «Preveo un partido tremendamente igualado. Super complicado. Tendremos que dar nuestro máximo nivel», avanza Marcelino García Toral, entrenador del 'submarino' amarillo. Sus palabras son un claro aviso a navegantes para sus futbolistas. «La atención está centrada al 100% en el Alavés, no vamos a pensar en el Real Madrid», ha comentado en la previa del choque en Mendizorroza, desviando la atención del siguiente compromiso liguero.

El técnico groguet señala que la clasificación no refleja el fútbol del conjunto albiazul. «En las últimas jornadas los puntos sumados no corresponden con los merecimientos que han hecho sobre el terreno de juego». El último ejemplo fue la jornada pasada ante el Mallorca, tras una segunda mitad en la que los hombres de Coudet se adueñaron del partido para lograr el empate (1-1). «Espero un partido muy complicado, con un rival con un juego vertical, directo, que presiona en la segunda jugada y que mira hacia delante. En defensa busca incomodar permanentemente, son superagresivos».

Porque, al igual que Jagoba Arrasate, su colega en el Villarreal también cree que esa situación en la tabla supone un plus a la hora de saltar al campo. «Se juegan muchísimo». Nos va a requerir defender muy bien en todas las zonas del campo, hacen transiciones muy rápidas. «Vemos los resultados de los equipos de abajo y está claro que es muy difícil vencerles. Además todos los resultados son súper ajustados», ha analizado, sosteniendo que «la efectividad en las áreas decantará el partido». Una parcela, la defensiva, en la que el Alavés tiene un 'debe' porque pese a conceder pocas ocasiones, ha encajado en las últimas 14 jornadas.

García Toral también ha mostrado su malestar por lo ocurrido el lunes. El Villarreal debía enfrentarse al Espanyol, pero el partido fue suspendido por la alerta roja meteorológica por fuertes lluvias. «Se tomó una decisión precipitada y poco razonada. Suspender un partido a las 21.05 horas cuando ya debía haber empezado si existía una alerta roja con antelación, el sentido común dice que el partido debía suspenderse a media tarde. 15.000 personas debían volver a su casa y eso les enfrentaba a la situación».

Está en el aire saber cómo les afectará encadenar 15 días sin competición. «Somos junto con el Espanyol un equipo que no va a competir el 15 días y veníamos en una buena dinámica. ¿Cómo nos va a afectar? Veremos. Si no hacemos un buen partido tampoco podremos decir que fue ese el motivo, tenemos que centrar la atención en el encuentro». Este hecho también presenta una oportunidad a los albiazules para meter presión al Espanyol, que le aventaja en cuatro puntos en la clasificación.

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