Carlos Vicente y Antonio Blanco festejan con Rioja el gol del extremo al Cádiz. Igor Martín

Alavés-Rayo (14.00 horas)

El Alavés va «con todo» a por la tranquilidad

Jornada 28. ·

Sin bajas y con un Mendizorroza a rebosar, busca el triunfo que le dé paz clasificatoria. «Es el partido más importante del año», destaca Luis García

Iñigo Miñón

Vitoria

Domingo, 10 de marzo 2024, 00:33

Cuando Luis García Plaza lanza una arenga en euskera es porque el Deportivo Alavés está ante una cita de altos vuelos. Su particular amuleto de ... las grandes ocasiones, el que tan bien le funcionó el curso pasado en los compromisos decisivos por el ascenso. «Bihar partida garrantzitsua Mendin, denok batera garaipenaren alde», dijo el entrenador albiazul antes de recibir al Rayo. «Para mí es el partido más importante del año», aseguró sin dudar el técnico, consciente de lo mucho que hay en juego este mediodía en Mendizorroza (14.00 horas). Nada menos que la paz clasificatoria en la jornada 28. No definitiva, pero sí «una situación buena y estable» en caso de victoria ante los franjirrojos.

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«Muy importante», insiste. «Súper importante», recalca. Por si había alguna duda. Más, si cabe, tras el triunfo del Cádiz ante el Atlético, que acerca la frontera del descenso a siete puntos. Aunque más inquieto estará el Rayo, que la tiene a cuatro. Abrir una brecha de seis con un rival directo y mantener el colchón de diez con el pozo es un premio demasiado tentador como para obviar el mensaje del entrenador. Efectivamente, el conjunto babazorro está ante un encuentro muy relevante.

Y va «con todo». A nivel futbolístico, porque Luis García no tiene bajas más allá de la lesión de larga duración de Sedlar. Duarte, que no pudo jugar en El Sadar por un virus estomacal, y Abqar, que se retiró del derbi ante Osasuna con molestias en la cadera, están disponibles. «Algún cambio habrá». Si cuando las cosas funcionan es aconsejable no tocar nada, cuando no salen del todo bien quizás sea el momento de agitar un poco el árbol. Puede volver Antonio Blanco.

Opciones para Carlos Vicente en la banda derecha después de dos partidos discretos de Sola. O para Kike García en punta en un contexto en que sus virtudes pueden encajar mejor que las de Samu, más peligroso con espacios. «Pero el equipo, más allá de un resultado puntual, está bien, sabe a lo que juega. Aunque llevemos cinco partidos sin ganar, no lo veo mal», precisa el técnico. Así que la base será la habitual.

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Lucha por la permanencia

El triunfo del Cádiz añade responsabilidad al duelo, especialmente en el bando franjirrojo

El conjunto babazorro quiere ir con todo también a nivel táctico. Que el rival vea a «un Deportivo Alavés que salga desde el primer minuto 'a full'». El plan es «salir desde el principio a ser mandones e intentar meter al Rayo atrás». Si la escuadra vitoriana está inmersa en una mala racha de resultados, la madrileña le supera en ese aspecto. Ocho encuentros seguidos sin conocer la victoria –tres empates y cinco derrotas–, cambio de entrenador incluido.

Se fue Francisco y llegó el joven Iñigo Pérez, que debuta en Primera con solo 36 años. «Si le han cogido es porque está preparado», dice Luis García Plaza, que alcanzó la máxima categoría con 37, tras conseguir el ascenso con el Levante. El técnico navarro se estrenó con un ilusionante empate ante el Real Madrid en Vallecas (1-1), perdió en Girona (3-0) y volvió a firmar tablas en casa contra el Cádiz (1-1).

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Confianza

«El equipo, más allá de un resultado puntual, está bien, sabe a lo que juega», afirma el técnico albiazul

Y el Alavés va con todo también en el apartado emocional. Mendizorroza se volverá a vestir de gala con una gran asistencia. El club anunció el jueves que quedaban menos de mil entrada para este partido. «Va a haber un ambiente increíble», anuncia Luis García, que volvió a deshacerse en alabanzas hacia la pasional hinchada albiazul. «La gente va a estar a tope porque saben lo que cuesta estar en Primera División y saben nuestras condiciones cuando empezamos la Liga. La hora –las dos del mediodía– es un poco rara, como siempre, pero a esta afición le da igual», apunta el técnico. Es un partido fundamental para la salvación y, en todos los aspectos, «vamos a ir a por él con todo».

Dos viejos conocidos en el eje de la zaga franjirroja

Dos viejos conocidos de Mendizorroza formarán el muro del Rayo en su visita al Deportivo Alavés. Aridane (Tunieje, Las Palmas, 1989) y Lejeune (París, Francia; 1991) han sido los dos centrales elegidos por Iñigo Pérez en sus tres partidos al frente del conjunto vallecano. Dos defensas que acumulan más de 260 partidos en Primera División, 158 el galo y 108 el canario, pero no encontraron su sitio en Mendizorroza, donde se estrellaron contra las circunstancias especiales del conjunto vitoriano.

Aridane llegó joven (22 años) a un Alavés incierto de Segunda B, en la primera temporada del Grupo Baskonia al frente del club babazorro. En 2011, la temporada que empezó con Luis de la Fuente y acabó con Granero. El central canario empezó jugando con el actual seleccionador español, pero el siguiente técnico se decantó por Quintanilla y Luis Prieto. Catorce partidos ligueros como albiazul antes de relanzar su carrera en la misma categoría de bronce con el Eldense y el Cádiz -ascenso- y asentarse en Primera en Osasuna, donde estuvo seis temporadas antes de firmar este verano por el Rayo.

2,5 millones más variables

A Lejeune no se le puede discutir una calidad que le llevó a la Premier League (Newcastle), pero en Vitoria tuvo la mala suerte de integrar un equipo decadente que terminaría en Segunda. Jugó 68 partidos en Primera con los vitorianos, pero, sin dar un mal rendimiento, quedó marcado por algunos errores muy llamativos. Tras el descenso fue cedido al Rayo y en verano cumplió su deseo de seguir en Vallecas en un traspaso cifrado en 2,5 millones de euros más variables.

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