El mercado de invierno aún busca su espacio
Solo Aleñá ha logrado asentarse en el once, mientras que Cabanes sufre para ser protagonista y Garcés sigue en segundo plano
Hace poco más de dos meses que el mercado de fichajes invernal echó la persiana. Entonces se le acabaron al Deportivo Alavés las oportunidades ... de reforzar su plantilla para el tramo final del curso. Aunque las condiciones a principios de enero sugerían una actividad mercantil escasa, la dirección deportiva albiazul acabó cuajando otra ventana animada, como es costumbre. En conjunto, dos fichajes en el tramo final que se sumaron al de Garcés, sellado en verano pero que no pudo tomar visos de oficialidad hasta el principio de año.
Aunque la participación desde entonces del defensa argentino, Pau Cabanes y Carles Aleñá ha sido muy dispar. Protagonismo absoluto del último y, en cambio, un rol muy secundario de los otros dos futbolistas. Muestra de las complejidades de un mercado que no siempre acostumbra a ofrecer opciones de impacto inmediato y, que en muchas ocasiones, plantea incógnitas de resultado dispar.
Así podían entenderse, aunque de diferente forma, los casos de Aleñá y Cabanes. Porque ambos llegaban a Mendizorroza en busca de dar un golpe sobre la mesa. El primero, tras quedarse sin hueco en el Getafe; el segundo, como trampolín para asentarse en Primera. Sin embargo, si el catalán se ha confirmado como una pieza más que válida para la élite, al canterano del Villarreal le ha costado romper el cascarón.
Adaptación
Cierto es que a favor de Aleñá ha jugado la falta de un dueño claro en la izquierda. Coudet vio en él un perfil diferente, pero necesario para poder ser un equipo más propositivo con balón. Fruto de esa confianza ha disputado todos los partidos -salvo el primero, ante el Getafe, por la cláusula del miedo- y solo unos problemas físicos le hicieron salir del banquillo contra el Girona. Cabanes, en cambio, suma cuatro presencias sin haber logrado desbancar a Carlos Vicente.
El caso de Garcés es diferente. Tras no poder incorporarlo en verano, el hecho de que llegase libre en enero pero sin haber disputado minutos en un año sugería que su proceso de adaptación al equipo iba a ser lento. No debutó hasta marzo y sus tres partidos han sido siempre como suplente. Aunque en ellos ha dejado un tono general positivo que es insuficiente, de momento, para superar a Abqar, Mouriño y Diarra en la jerarquía defensiva.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión