Róber, un instante antes de marcar el gol de la victoria. IGOR MARTÍN

Alavés 2 - 1 Leganés

El Alavés refuerza su candidatura al ascenso

Logra un sufrido triunfo ante el Leganés con dos tantos de Róber y aprovecha los tropiezos de los rivales para regresar a posiciones de ascenso directo

Lunes, 24 de abril 2023, 00:21

Acinco jornadas del final del campeonato el Alavés reforzó anoche su candidatura al ascenso. Cuando la tabla se ha convertido en un embudo por donde ... sólo pasarán los mejores o los más regulares, cumplió con su tarea. Un sufrido aunque merecido triunfo ante el Leganés en Mendizorroza para regresar tras los tropiezos de los rivales directos a las posiciones que dan derecho a jugar el próximo ejercicio entre los mejores. La gran virtud albiazul es, sin duda, la constancia.

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A base de insistir e insistir llegan todo tipo de resultados, aunque predominan los favorables. Si al derroche de energías y al orden se le añaden pizcas de calidad, como en la asistencia de Villalibre para el primer tanto o el contragolpe de libro con el segundo tanto de Róber para solventar el choque a pocos minutos del final, todo es más sencillo. Sin olvidar que las fuerzas se encuentran casi siempre equilibradas e, incluso, la escuadra visitante no anduvo lejos del 1-2.

Miramón había igualado con un golazo y Karrikaburu rozó el segundo. No hubiera sido justo en un duelo donde Sivera resultó un espectador, pero así es la categoría. Todo apunta además a que así seguirá y los desfibriladores no estarán de más. Cinco equipos en cuatro puntos a cinco jornadas del final. Casi un trabalenguas clasificatorio. La garantía de una emoción superlativa.

Y es que la secuencia del fin de semana parecía rodada por el propio Alavés. Igualada del Eibar el viernes en Ipurua para encadenar su quinto duelo sin ganar, empate entre Las Palmas y Levante el sábado como mejor resultado posible de dos rivales directos y, poco antes del choque en Mendizorroza, bendita victoria del Racing frente al Granada. A partir de ahí, el plantel albiazul fue capaz de dejar la cámara para convertirse en protagonista y liquidar al Leganés. No sin apuros. No sin constatar que nada ha sido fácil y queda lo más complicado.

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Para confirmar también su fortaleza en casa (42 de los 65 puntos) y cerrar una película prácticamente perfecta en las cinco últimas jornadas. Tras recortar siete puntos al Eibar, seis a Las Palmas y cinco a Granada y Levante. Lo que se antojaba complicado, problemas ajenos y sonrisas albiazules, se han unido para convertir el tramo final del campeonato en un polvorín. Una visión realista -la categoría demuestra que no siempre es la correcta- apuntaba a que el Alavés necesitaba llegar a esta jornada bien situado si quería tener opciones de una de las dos primeras plazas.

Podía haber sido mejor sin dejarse por el camino algunos empates dolorosos en Vitoria (Lugo y Andorra), pero a San Prudencio llega en su sitio. Con petición de ayuda al santo patrón para la visita al Levante, pero sin necesidad de solicitar un milagro. Claro que una revisisión del calendario (Levante, Albacete y Las Palmas fuera) y Granada y Málaga en Mendizorroza deja claro que se trata de atravesar a partir de ahora zona minada, de pisar con sandalias sobre cristales y salir indemne.

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1-1, susto y reacción

El preparador alavesista había mantenido en el inicio del choque ante el Leganés la estructura del duelo disputado ante el Sporting y Róber, gran protagonista final, relevó al sancionado Salva Sevilla, con el traslado de Guridi a una posición más retrasada. El guipuzcoano cuajó un partido notable y apuntó que, posiblemente, su despliegue físico y llegada al área contraria sea más eficaz desde esa posición.

No es un orfebre ni un goleador, pero sí un excelente elemento dinamizador y de cohesión. Por obligación, ayer con Abqar en el banquillo y Sedlar sin convocar, Laguardia y Duarte ocuparon de nuevo con acierto las posiciones centrales de la zaga con Javi López en el carril zurdo. Ante un adversario que se plantó en Mendizorroza con un claro 4-4-2 donde Arnaiz y Karrikaburu tomaban la punta de ataque.

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El Alavés nunca se esconde ni juega al escondite. Lo suyo es poner la cara y si es necesario derribar muros a cabezazos. Desde el pitido el cuadro de García Plaza anuló al Leganés y tiró de esa potencia que lleva a los adversarios hacia su propio campo. A partir de ahí, balones a la banda y centros y más centros. A la espera de ese toque diferencial. Ayer lo tuvo un Villalibre asistente, en el gol y en alguna acción más, Róber con su acierto goleador y también un activo Rioja.

Con las luces encendidas, este trío aupó al Alavés. Que apretó tras marcar el 1-0 antes del descanso y sufrió después del 1-1. Ese bofetón que le dejó por unos instantes cerca de la lona con los dedos del rival marcados en la cara. Después de ocho jornadas anteriores con dos goles a favor y dos en contra, el 2-1 se antojó una goleada. Pero sobre todo una liberación para dejar atrás la sensación de oportunidades perdidas. Si los adversarios directos despejan el camino, ese que luce la reciente campaña albiazul, será cuestión de pasear por él.

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El Leganés había parecido conformarse con el 1-1 y el susto de Karrikaburu mientras los albiazules volvieron a encenderse. Con la entrada de Miguel para formar con dos puntas, con el empuje incansable de Guridi y de la banda izquierda. Hasta que Róber, con cuatro ocasiones claras y dos goles, decantó el duelo. Con ese tanto defendido después sin demasiados problemas por un Alavés con madurez para aferrarse a un resultado clave. Cuando el tic tac de la cuenta atrás comienza a sonar con fuerza el Alavés ajusta su reloj. Por delante, eso sí, restan minutos y segundos gloriosos.

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