

Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Iosu Muro
Sábado, 10 de mayo 2014, 13:38
Pocos deportes admiten tantas historias de superación como el atletismo. Las ciudades se inundan de corredores que día tras día salen al campo o a la calle en busca de kilómetros que completar, pero no todos lo hacen de la misma manera ni empujados por el mismo mensaje. El domingo, Vitoria se convierte en el centro neurálgico de todos estos atletas en el Maratón Martín Fiz, y en esta carrera se encontrarán Rafa Ledesma y Emilio Sáez Soro.
El primero de ellos es vizcaíno, aunque reside desde hace muchos años en Vitoria, donde dirige la delegación provincial de la ONCE. Durante mucho tiempo ha sido una de las caras más visibles de la halterofilia para ciegos, disputando los Campeonatos del Mundo de 'powerlifting'. Aún así, el gusanillo del 'running' no le llegó hasta hace cinco años, cuando la edad le hizo recapacitar. "A los 44 tuve una crisis, hasta entonces había estado en la seguridad de un gimnasio, sabiendo el lugar de cada máquina de memoria, pero quería salir fuera, superar mis limitaciones, vivir en la naturaleza", explica Ledesma.
Probó con el ciclismo en tándem y le fue bien, pero hace un año, en estas mismas fechas, decidió dar el salto y participar en el Maratón Martín Fiz. "En aquella ocasión tuve que necesitar dos guías, uno para cada media", comenta orgulloso. Ahora, acompañado por Gorka Oraá, puede alardear de haber realizado cinco maratones, la última en Madrid hace dos fines de semana. "Me dicen que puede ser demasiado», bromea, aunque se toma muy en serio su método de trabajo. «Tengo una visión del 10 por ciento y lo único que puedo identificar es la línea blanca en un bidegorri. He llegado a hacer una media maratón yendo y viniendo en una zona de 500 metros".
Para él, este deporte no significa lo mismo que para el resto. "El running es solitario, pero para mí es trabajo en equipo. Tengo que compenetrarme con mi guía, entendernos, saber coordinarnos", señala. "Eso también nos ayuda a dar un poco más de nosotros mismos cuando estamos sufriendo. A veces, terminamos, nos abrazamos y uno le dice al otro 'si no estás tú, no voy'".
Sin lesiones
En la línea de salida, Ledesma se encontrará con miles de compañeros. «Normalmente son muy respetuosos, ven que llevamos el peto de ciego y nos dan ánimos», aunque en esta ocasión en el pelotón inicial también estará Emilio Sáez Soro.
Este profesor extremeño afincado en Castellón, también de 49 años, decidió combatir sus problemas físicos a la hora de correr librándose de las zapatillas. "Después de 33 años compitiendo en fondo y tras dos décadas sin poder evitar las lesiones, empecé a experimentar con opciones minimalistas para mis pies, utilizando calzado sin amortiguación y resultó más satisfactorio", apunta. Así llegó a la conclusión de que si quería mantener un estado de forma óptimo, debía dejar los pies al desnudo. "A raíz de esta transición, decidí realizar 12 maratones en un año, y en la primera los resultados fueron muy saludables, aunque he aparcado la competitividad. La recuperación es mucho más rápida, antes tardaba una semana en quitarme todas las molestias y ahora termino y a los dos días estoy perfecto", añade.
El Maratón Martín Fiz ha colocado ya todos los dorsales disponibles, un total de 4.167, según datos de la organización. Este número está compuesto por los 820 atletas del maratón, 1.430 de la media maratón, 790 de la carrera popular, 427 de la maratón sobre patines y 700 de la carrera txiki. Los patinadores empezarán a las 8.50 y el resto, salvo los pequeños, a las 9.00 horas.
La entrega de los dorsales se realizará mañana y el sábado en la plaza Alaia de El Boulevard, de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas. Asimismo, el sábado se proyectará en Dendaraba la película 'Fiz, puro maratón' (18.00 y 20.00 horas).
Sáez explica que el descalcismo lleva varios años siendo una tendencia al alza en los Estados Unidos, pero la moda está calando en España. "Cada vez es más común en las carreras ver a gente con 'fingers', una especie de guantes que se ponen en los pies, o sandalias". "Durante mi aventura he estado compartiendo mis vivencias con más gente y ellos también están probando".
Ahora, ha decidido compartir su experiencia en un libro, 'La aventura de correr descalzo', que ha presentado en el aula de formación de Landher. "Vitoria es un lugar en el que hay mucha tradición en el mundo de las carreras y creía que era oportuno presentar el libro y competir aquí".
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La Unidad de Trasplantes de Valdecilla, premio Cántabro del Año
El Diario Montañés
El mejor restaurante de comida sin gluten de España está en Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.