El Ayuntamiento de Vitoria rectifica y quitará un carril al BEI en dos tramos

El PNV, que lidera este área en el gobierno municipal que comparte con el PSE, decide así rectificar su proyecto original, del que su mayor valedor fue el exalcalde Gorka Urtaran, y reconoce que existe un «problema» de tráfico en el Sur, que se ha visto agravado por esta infraestructura. Gurtubai fue más explícito a la hora de reconocer que el tráfico ha ido a peor con la implantación del bus eléctrico ha «perjudicado» el tráfico. «No sería justo decir que el problema lo ha provocado el BEI, pero probablemente lo ha empeorado», admitió Gurtubai tras las duras críticas del PP, que le acusaba de buscar ahora «la solución a un problema que ha generado» su partido.

Sin embargo, fue en el PP donde más buscó la complicidad el edil jeltzale para buscar posibles acuerdos en cuestiones de movilidad, principalmente en el BEI. Pese a la feroz crítica de los populares durante la pasada legislatura y la última campaña electoral, Gurtubai propuso «mirar adelante» y observó que «hay margen en el que podemos llegar a acuerdos». En unos términos similares se pronunció también durante su comparecencia del área de Seguridad, donde pidió «empezar de cero» a los populares.

Los populares, que convirtieron su campaña contra el bus eléctrico en su principal caballo de batalla en la carrera electoral, pidieron más medidas «imprescindibles» para enmendar el proyecto. Entre ellas figuran la «recuperación de los 85 pasos de cebra (después se abrieron a rebajar esa cifra)» y eliminar las «señales inventadas» que acompañan al BEI. «Todo es la continuación de una chapuza. Hay que rectificar el proyecto y no hacer parches en toda la línea», señaló el concejal Alfredo Iturricha. Mucho más frontales fueron las posturas de EH Bildu y Elkarrekin Podemos, firmes defensores del BEI, y que consideraron «un paso atrás» la propuesta de destinar un carril para el tráfico rodado.

El Ayuntamiento encargará en los próximos meses la redacción de un proyecto para analizar los efectos de la implantación de la medida y «ver qué supone económicamente». En cualquier caso, Gurtubai aseguró que las correcciones no «comprometerán la velocidad comercial» de este medio de transporte, que ha superado en número de usuarios a la antigua línea Periférica, a la que sustituye.

La medida anunciada ayer, y que fue planteada por la portavoz Beatriz Artolazabal durante la campaña electoral, busca precisamente aligerar en cierto grado la circulación en el entorno de Txagorritxu, descongestionar de forma indirecta la zona de Iturritxu y, sobre todo, 'recuperar' para la circulación el paseo de la Zumaquera, ahora exclusivo para el BEI en uno de sus tramos.

A pesar de que el anuncio del proyecto para cambiar el BEI acaparó buena parte de la atención, la posible construcción de una nueva carretera en el Sur sobrevoló la comparecencia del teniente de alcaldesa. Es, sin duda, uno de los principales asuntos que marcarán la legislatura, a la espera de que todas las formaciones se posicionen. El PNV por de pronto, avanzó que la propuesta de construir un nuevo vial sería la «mejor» solución, aunque aseguró que la decisión final «saldrá de la mesa de trabajo» que se formará con todos los partidos.

EH Bildu se mostró un tanto escéptico en relación a esa reunión que se convocará de manera periódica, tras las declaraciones del presidente del PNV alavés, que apostaba por crear el nuevo vial, y del concejal de Urbanismo, Borja Rodríguez (PSE), quien advertía de que el Plan General no contempla esa opción. «Sus prioridades han ido dirigidas al reparto de asientos más que a trasladarnos sus intenciones», dijo Unai Fernández de Betoño (EH Bildu), quien se mostró «preocupado» por la posible carretera en el Sur.

Por otra parte, el equipo de gobierno también avanzó que buscará el consenso para una nueva ordenanza de movilidad, para sacar a las bicis de las aceras, otra para los taxis, todavía por definir, y que establecerá la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), que restringe la entrada de vehículos, antes de final de año. Los grupos de la oposición, eso sí, le reprocharon que Vitoria va «tarde».