Tuvisa gasta un 26% más por la subida de la electricidad y el gasoil

La principal partida corresponde al consumo eléctrico, con un incremento previsto de 700.000 euros. El informe de Tuvisa señala que la «variación» entre agosto del año pasado y la última factura de mayo es «del 110%». De hecho, Tuvisa tuvo numerosas dificultades para adjudicar su contrato eléctrico, que 'alimenta' al BEI y alumbra las cocheras, por falta de interés de las empresas suministradoras. Es más, la compañía responsable del anterior servicio rompió el acuerdo porque llegó a ser «inasumible» y poco después quebró.

El segundo capítulo más cuantioso corresponde a los carburantes. Tuvisa calcula que el «sobrecoste» alcanzará los 650.000 euros en este ejercicio. No obstante, la cifra no contempla la prórroga de la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible, recién aprobada por el Gobierno central. El cálculo se realiza con el precio más alto abonado en mayo (1,75 euros por litro) y sin aplicar la rebaja hasta final de año. Lo más probable es que el Ayuntamiento mantenga la partida intacta, ante posibles nuevas subidas en carburantes o en otros conceptos. El escrito de Tuvisa subraya la «dificultad que existe para realizar una previsión ante la incertidumbre y la variabilidad» actuales.

El taller por el que pasan de forma continua los urbanos se encarecerá «en un 10%», según los cálculos de los responsables de la sociedad pública municipal. «Las empresas proveedoras no ven atractivo presentarse a los concursos públicos y los precios de adjudicación están en algún caso por encima de los de mercado para garantizar la rentabilidad a medio plazo», señala el escrito. Este capítulo rondaría los 200.000 euros. El Ayuntamiento transferirá los 1,6 millones de los ingresos extraordinarios del Fofel.

Los urbanos, en este sentido, pasan inspecciones de forma constante y, de hecho, el número de 'visitas' en abril superó las 400, de las que 75 eran de los nuevos vehículos del BEI. Por otra parte, Tuvisa no incrementará el apartado de ingresos previstos, vinculado de forma directa al número de usuarios y la venta de billetes. «Se necesita un mayor tiempo para recabar información sobre el efecto BEI», recalca. La sociedad también ajustó en 55.000 euros la partida de vestuario, al entregarse todo el material en el presente ejercicio.