Álava despide un otoño «movidito» y se prepara para una Navidad fría
En los últimos meses ha habido más horas de sol, unas cuantas borrascas y 0,7 grados por encima de la media. Las fiestas arrancarán con paraguas
Quienes se sienten a la mesa en Navidad con las ventanas abiertas, como recomiendan las autoridades sanitarias para reducir al mínimo el riesgo de contagio, ... no tendrán más remedio que abrigarse. Las fiestas que se encuentran a la vuelta de la esquina llegarán a Euskadi acompañadas de una notable caída del mercurio, con máximas que no superarán los diez grados, y también de precipitaciones «débiles» y de un descenso de la cota de nieve. «Va a hacer tiempo de quedarnos en casa», resume José Antonio Aranda, responsable meteorológico de Euskalmet, con las previsiones en la mano.
El mapa del tiempo empeorará según se acerquen las primeras celebraciones. Hasta este miércoles, prevén en la Agencia Vasca de Meteorología, continuarán las temperaturas suaves influenciadas por los vientos del Sur que ayer dispararon los termómetros en Álava hasta rozar los 20º en estaciones como Gardea pero, a partir de la tarde, se producirá «un cambio de patrón» que, empujado por algunos frentes, dejará un ambiente húmedo y bastante más frío en los tres territorios.
La jornada de Nochebuena ya amanecerá con nubes y amenaza de lluvia. La temperatura máxima se quedará entre los 8 y los 11 grados, en función de la zona, y la mínima podría caer hasta los 4, y esto sólo será un aperitivo del frío que se espera para el día siguiente. La nubosidad será «contundente» el viernes 25, Navidad, que también se avecina pasado por agua y con el mercurio aún más helado. Según Euskalmet, no subirá de los 7-8º en la vertiente cantábrica y no pasará de los 5º en el resto del País Vasco. La cota de nieve irá en descenso a medida que avancen las horas hasta los 500 o 600 metros aunque, como remitirá asimismo la probabilidad de precipitación, se descarta la típica postal navideña. Y el fin de semana, agrega Aranda, «el tiempo será estable pero muy frío».
Hasta 73 avisos y alertas
El arranque de las fiestas con bufanda y guantes borrará cualquier recuerdo del «cálido» otoño que este lunes cedió el testigo al invierno en el calendario. La pasada estación meteorológica destacó por la subida de la temperatura media para la época –0,7 grados por encima, que «puede parecer poco pero es bastante»– y por haber disfrutado de un 14% más de horas de sol, especialmente, en el interior de Álava. El experto se fija también en el elevado número de avisos amarillos (60) y alertas naranjas (13, una docena de ellas por viento fuerte y mala mar en octubre) que hubo a lo largo y ancho de Euskadi. Por aquí pasaron varias borrascas, como 'Bárbara', que sopló a 172 kilómetros por hora en Oiz, e incluso una tormenta tropical, 'Epsilon'. «Ha sido un otoño bastante movidito», reconoce.
El pluviómetro refleja también esos contrastes. Octubre, por ejemplo, fue «lluvioso, pero nada que ver con el de 2019, el más lluvioso del siglo» y noviembre se despidió «muy seco». Ese mes cayó menos del 50% de precipitaciones en Euskadi que otros años y en áreas como el Goierri o las Encartaciones, por debajo del 20%. El otoño resultó algo más húmedo en puntos de Álava. como Moreda, o de Bizkaia, como Bermeo, pero «no hubo ningún día de lluvias intensas».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión