Ramiro González enfría las aspiraciones del PP y descarta un debate fiscal hasta 2020
El diputado general afirma que el Gobierno foral se encuentra elaborando su presupuesto y que cualquier cambio impositivo cambiaría ese planteamiento
El PP priorizó hace semanas abrir el 'melón' para afrontar una reforma fiscal amplia que suponga una bajada generalizada del IRPF, sobre todo para ... las clases medias. Sin embargo, la formación que dirige Iñaki Oyarzábal en Álava lo hizo consciente de que tenía escaso recorrido por la mayoría absoluta que suman el PNV y el PSE en las Juntas Generales. El asunto superó este martes su primer trámite pasando por la reunión de portavoces de la Cámara foral, pero el diputado general, Ramiro González, descartó que la medida vaya a prosperar de cara al próximo año.
El máximo dirigente foral insistió en que ese «análisis sobre la situación tributaria» debe abordarse «en 2020», como ha repetido en las últimas semanas, y no ahora que su ejecutivo -como el del resto de diputaciones- está empezando a trabajar en la confección de los presupuestos de cara al próximo ejercicio. «Si hoy cambiara la normativa fiscal, esas Cuentas igual no valdrían. Lo lógico y lo pactado es estudiar esas modificaciones en 2020, sin solaparse con el presupuesto», afirmó dejando evidente que ese análisis se desarrollará durante la primera mitad del próximo ejercicio.
«Yo no le voy a hacer la campaña electoral a nadie», comentó González, consciente de que sus palabras serán utilizadas por el PP de forma inmediata como una acusación de bloqueo.
Si bien la pasada semana el diputado general apostó por «reflexionar» sobre el Impuesto de Patrimonio después que el titular de Bizkaia de Hacienda hablara sobre la fuga de contribuyente por el tributo de Sucesiones y Donaciones, esta vez trató de ser cauto, eludió concretar y apostó por realizar un debate en su conjunto que analice «cuál es la fiscalidad en cada uno de los territorios (históricos)».
Además, y siguiendo las reclamaciones de sus socios del PSE, apostó por mantener una recaudación que sirva para mantener los servcios, pero que sirva para «buscar la competitividad» de las tres provincias vascas frente a los contribuyentes que han preferido 'mudarse' para aprovecharse de ventajas fiscales como las recién implantadas en la Comunidad de Madrid.
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