Ayuntamiento de Vitoria
Policías locales de Vitoria crean un frente asindical y proponen 50 mejorasEl «hartazgo» por la «deriva» del cuerpo moviliza a más de la mitad de la plantilla. Plantean incorporar táser y drones o ampliar unidades especializadas
Se gesta una revolución interna en la comisaría de Aguirrelanda. Un movimiento asindical ha prendido en una parte notoria de la plantilla de la Policía Local de Vitoria ... . El «hartazgo» generalizado por la «deriva» de este cuerpo a lo largo de los últimos tiempos ha alumbrado esta reacción inédita. Las bases de la Guardia urbana ultiman un borrador –de medio centenar de propuestas– con el que pretender recomponer la organización, modernizar el material a su alcance y mejorar su respuesta a la ciudadanía vitoriana, a la par que incrementar sus condiciones salariales.
El origen de este fenómeno desconocido en las instituciones vitorianas se remonta a varias semanas atrás. Alguien creó un chat al que pronto se enganchó más de la mitad de los alrededor de los 400 agentes municipales. Y desde el primer momento se barruntaron soluciones en vez de alimentar críticas. Hubo un par de asambleas informativas. Se dejó de reforzar en el Half (media maratón) del 3 de junio como medidor de su fuerza. El seguimiento resultó tan masivo que sólo hubo una patrulla operativa para la seguridad en Vitoria.
«Hay una Vitoria bonita y otra fea. Somos la línea de contención, necesitamos medios»
A partir de ahí eligieron un nombre –Movimiento de la Policía Local de Vitoria Gasteiz– y crearon grupos de trabajo para especificar las necesidades más acuciantes. Según ha podido saber este periódico de fuentes internas de la Guardia urbana, el borrador va «muy avanzado», incluye medio centenar de propuestas y se entregará en septiembre a los sindicatos representados en el comité municipal para que uno, o varios, lo presente al Departamento de Seguridad, ahora capitaneado por Iñaki Gurtubai (PNV), político curtido en la Ertzaintza.
La «falta de efectivos» y la «sobredimensión» de algunas áreas internas es palmaria, coinciden. «Esto ha llevado al cierre puntual de unidades como violencia intrafamiliar o denuncias». O al duermevela de Menores. Este grupo arrancó antes de la pandemia con tanta fuerza que su modelo se copió en otros lugares. Hoy, en cambio, «su influencia es residual. Esto cambiaría si se añaden 4 agentes para que diligenciar (hacer atestados)». Alegan desde este frente asindical que «faltan efectivos en todas las unidades especializadas». Reclaman una OPE «anual», así como «abrir la formación» a expertos externos y desarrollar cursos de reciclaje profesional de manera más dinámica.
136 armas blancas requisadas
«La calle está más o menos cubierta, ya que los patrulleros pueden moverse de sus zonas delimitadas para ayudar a otros compañeros». No en vano, la conflictividad ha aumentado en las calles. Ahora resulta habitual confiscar navajas o reducir a personas que esgrimen vasos o botellas rotas en peleas. Sólo el año pasado requisaron 136 armas blancas. Por eso reclaman «dotar de una pistola táser (que suelta descargas eléctricas), al menos una por cada turno (hay seis)» por si esas intervenciones se ponen feas. La Ertzaintza y la Policía Local de Basauri ya llevan de este efectivo dispositivo de contención.
«Hay una Vitoria bonita y otra Vitoria fea y nosotros somos la línea de contención. Necesitamos medios». De ahí derivan otras sugerencias como «un escudo y un ariete en cada coche».
También abogan por contar con algún dron en nómina a corto plazo. Ayudaría a la unidad de Medio Ambiente en el rastreo de vertidos ilegales, en el control de grandes concentraciones como la Bajada de Celedón o en el seguimiento de personas atrincheradas.
En la media maratón de Vitoria pidieron no reforzar y sólo hubo una patrulla en la calle
En un velado tirón de orejas a la clase política local urgen que la plaza de comisario sea cubierta «en propiedad». En la actualidad la decide cada nuevo equipo de gobierno. «Lo que quieren son personas dóciles y sin capacidad de decisión. Una organización es seria de arriba a abajo, y más si es jerarquizada», claman. Ese puesto capital está además judicializado.
El asunto económico también tiene su peso en este movimiento de generación espontánea. Según sus estimaciones, han cedido «un 17% de poder adquisitivo desde 2010». Urgen que los sábados se cobren como «festivos» por «la sobrecarga de trabajo respecto a un día laborable normal», así como varios complementos por conciliación.
Las principales reivindicaciones de este movimiento sindical
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Más personal Mal endémico de este cuerpo que, en la actualidad, ronda los 400 efectivos pero con una carga diaria de trabajo «inasumible». El parche actual son las horas extras. Solicitan una OPE «anual».
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Un comisario con plaza fija En la actualidad es elegido a dedo por cada nuevo equipo de gobierno. Tener la plaza en propiedad (y por méritos profesionales) conferiría «independencia» al ocupante del cargo.
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Incorporar pistolas táser La medida de protección «más efectiva» ante «la mayor peligrosidad» en las calles. Sólo en 2022, este cuerpo confiscó en Vitoria 136 armas blancas, 16 puños americanos, 4 defensas eléctricas, 5 bastones extensibles y una catana.
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Uso de drones Ayudarían a la unidad de Medio Ambiente, que vigila grandes áreas rurales alrededor de Vitoria en busca de vertidos ilegales. Control de fiestas, manifestaciones, carreras o apoyo ante personas atrincheradas.
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Más formación Con expertos externos y de manera más habitual. Reciclajes anuales.
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Dos agentes por patrulla como mínimo Si no fuera posible, posibilitar patrullas de tres efectivos, como ya se realiza en otras ciudades.
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Vestuario Uno adecuado a otoño-invierno y otro para primavera-verano.
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Potenciar el renting de coches Frente a la compra. Esta semana hubo cuatro adquisiciones de automóviles híbridos y eléctricos.
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Cuatro agentes más a Menores Para que se encarguen de diligenciar los expedientes, lo que permitiría a la unidad ser autónoma y reactivarse.
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Subidas salariales Adecuar sus condiciones a otras policías. Según sus datos, acumulan una pérdida de poder adquisitivo del «17% desde 2010». Piden cobrar sábados como festivos al haber disparado el trabajo en esa jornada.
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