La Policía Local de Vitoria destapa el segundo narcobar en 48 horas
Agentes capturan al supuesto responsable cuando traía hachís para atender a nuevos clientes. Este supermercado de droga se encuentra en el barrio de El Pilar
Se reactiva la presión sobre los narcobares de Vitoria. Efectivos del GPA, una unidad especializada de la Policía Local, destaparon en la tarde ... de ayer, martes, un nuevo supermercado de droga. El operativo tuvo lugar en el barrio de El Pilar y se saldó con la detención de un hombre, el supuesto responsable de este establecimiento sospechoso de ser –en realidad– un puesto de venta de hachís.
Según ha sabido en exclusiva este periódico, la vigilancia de los agentes constató cómo varios clientes entraron al local y salieron, casi de inmediato, con pequeñas dosis encima para su consumo personal.
El presunto responsable del establecimiento comercial salió a reponer género y, a su regreso, los policías locales procedieron a su detención. Se le incautó «una gran pelota de hachís», de varios gramos de peso, razón por la que acabó detenido y conducido a la comisaría de Aguirrelanda. «Ya ningún narcohostelero se la juega a tener grandes cantidades ocultas en su negocio. Eso les obliga a reponer varias veces al día», relatan fuentes internas de la Guardia urbana sondeadas por EL CORREO.
A disposición judicial
Esta mañana de miércoles está previsto que el sospechoso pase a disposición del juzgado de guardia, Instrucción número 1, cuya titular previsiblemente le dejará en libertad con cargos a la espera de que en unos meses se celebre un juicio. Se expone a una larga condena.
Un ejemplo. Hace unos días, la Audiencia Provincial de Álava castigó con 4 años y medio de cárcel al exjefe de otro bar, éste situado en Zaramaga, dedicado a la venta de droga. La Policía Local encontró 26 gramos de cocaína ocultos bajo una cámara frigorífica de su establecimiento comercial.
Se da la circunstancia de que sólo 48 horas antes de este dispositivo, la Guardia urbana desmanteló otro presunto narcobar, enclavado a sólo una calle de distancia. En esa operación, desarrollada la noche del domingo, fueron arrestados dos jóvenes, de 23 y 24 años, acusados de despachar cocaína a pie de barra. La sorpresa entre los agentes actuantes fue mayúscula al acceder al interior del narcobar, los supuestos camellos contaban con un rudimentario gimnasio en la parte trasera de la lonja donde mataban el tiempo cuando no había clientes.
Los uniformados hallaron la cocaína escondida tras un electrodoméstico. Estaba en una cajetilla metálica de tabaco que contenía dos envoltorios.
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