El PNV mantiene silencio y el PSE lo tacha de «error»
«Es bastante ilógico que en una parcela uno pueda tener una denominación y la contigua tenga otra», defiende la socialista Cristina González
El silencio imperó ayer en el PNV. Ninguno de sus representantes políticos quiso opinar sobre la petición de ABRA al Gobierno vasco para etiquetar sus ... botellas como Viñedos de Álava. Ni siquiera el Departamento de Desarrollo Económico del Gobierno vasco, que dirige la jeltzale Arantxa Tapia, quiso posicionarse sobre la tramitación que deben completar en las próximas semanas.
Sin embargo, el PSE -socio de los nacionalistas en las principales instituciones vascas- no eludió el asunto. La secretaria general de los socialistas en Álava, Cristina González, consideró un «error» que en el mismo espacio geográfico convivan dos denominaciones de origen distintas. «Es bastante ilógico que en una parcela uno pueda tener una denominación y la contigua tenga otra», respondió a este diario la teniente de diputado general y titular foral de Comercio y Empleo.
Para González, la posibilidad de «comenzar desde cero» con una nueva marca, como reclama ABRA, es un riesgo empresarial para las bodegas. «No es algo que queramos promover porque creemos que irá en contra de los vinos que se suban a ese barco y que van a tener notables dificultades para ser reconocidos en el mercado durante mucho tiempo», analizó.
Si bien mostró respeto a lo que a partir de ahora decidan el Gobierno vasco y la UE, la líder socialista fue contundente en su rechazo a Viñedos de Álava. «Yo nunca tomaría ese camino y aconsejo que nadie lo haga para proteger el tejido bodeguero alavés», remató.
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