El pleno de Vitoria urge a Osakidetza a destinar más ambulancias medicalizadas

La escasez de UVI móviles en la provincia ha llegado al pleno del Ayuntamiento de Vitoria de este viernes, donde una mayoría ha acordado instar al Gobierno vasco y a Osakidetza a incrementar «con carácter inmediato» la actual dotación de ambulancias de soporte vital avanzado medicalizado. La demanda, planteada por el PP, ha contado con el respaldo del resto de la oposición que completan EH Bildu y Elkarrekin Podemos, sumando así mayoría para sacar adelante la petición, mientras los gobernantes PNV y PSE, que defendían una propuesta para «evaluar» si es necesario ese refuerzo, han votado en contra. La actual dotación está «muy por debajo» de las necesidades de la capital alavesa, ha denunciado la concejala popular Ainhoa Domaica.

Precisamente, la petición se aprueba tras unas jornadas en las que varios accidentes han evidenciado la situación «al límite y precaria» de estos recursos en la provincia, que solo cuenta con dos UVI móviles -en Vitoria y en Llodio, aunque esta última ejerce gran parte de su actividad en territorio vizcaíno-, mientras Bizkaia tiene cuatro más la del citado municipio ayalés y Gipuzkoa cinco. Así lo ha expresado el médico de emergencias Juan Carlos Apocada, con 20 años de experiencia en emergencia extrahospitalaria, que ha tomado la palabra en el turno popular del pleno en representación de los profesionales del servicio. «El pasado 11 de febrero fue muy duro para los compañeros que trabajan en la UVI móvil», ha relatado. «Al trágico fallecimiento de un niño de 11 años al que le cayó una losa encima se sumó el aviso de dos paradas cardiorrespiratorias el mismo día y en el mismo momento».

La primera de esas incidencias, según ha explicado, fue atendida por la UVI de Vitoria, pero para la segunda se tuvo que llamar a la de la localidad guipuzcoana de Mondragón, que «tardó media hora en llegar y atender esa parada, con el resultado de que esa persona falleció». El facultativo ha reseñado que Álava cuenta con solo «un recurso medicalizado» ya que el de Llodio «opera al 80% en Bizkaia». A la hora de dar servicio, «con relativa frecuencia surgen situaciones de urgencia vital que no pueden ser atendidas, porque el recurso se encuentra ocupado en otra urgencia». Por ello, algunos de esos avisos acaban siendo atendidos por un recurso «inferior», con lo cual «la probabilidad de supervivencia disminuye ostensiblemente».

Este problema se mantiene «desde hace años», pero «se ha visto agravado por la pandemia, porque la única UVI móvil de Vitoria también tiene que realizar traslados entre hospitales de pacientes Covid en situación crítica». «Hay turnos que pueden llegar a realizar 3 y 4 traslados en 12 horas, lo que prácticamente inutiliza el vehículo durante esa guardia». Tanto Apodaca como la concejala Ainhoa Domaica han señalado que la OMS recomienda que debe haber una ambulancia medicalizada por cada 120.000 habitantes, por lo que es evidente que Álava, con 330.000 vecinos, no tiene los recursos «acordes a sus necesidades».

«He venido a denunciar en nombre de los trabajadores la situación del servicio. Lo hago como médico y también como ciudadano que ha tenido que sufrir personalmente que no hubiera un recurso cuando mi propio padre sufrió una parada cardiorrespiratoria en mi presencia», ha confesado el doctor. El texto aprobado a iniciativa del PP ha sumado una aportación del grupo de EH Bildu para instar a la Diputación a cumplir el apartado de la Norma Foral de 2016 en el que se exige que la provincia «disponga de 3 ambulancias medicalizadas», como ha expuesto la edil de la coalición Iratxe López de Aberasturi.