Okupación en Vitoria

Pendientes del decreto que ha parado «docenas» de casos en Vitoria

«La gente no puede ni imaginarse la de casos suspendidos en la ciudad por esa causa. Hay compañeros que están preparando los papeles para prorrogar algunos procedimientos porque andan cerca de prescribir», ilustra un procurador. Estos profesionales del derecho coordinan los trámites entre los afectados y los juzgados. «Tengo clientes que ya no pueden más. Imagínate la tensión que supone el paso de los meses y que tu propiedad siga en manos de desconocidos», calibra otra profesional consultada.

No extraña, por tanto, que este sector ande pendiente de la confección del nuevo Gobierno por razones ajenas a la amnistia. «Nos tememos que el decreto podría renovarse otros seis meses a partir de enero. Sería demoledor». En teoría, ese dictamen contempla «compensaciones económicas a los arrendadores» a los tres meses de espera. Los procuradores consultados no conocen «ningún caso».

Los pulsos legales sostenidos en el tiempo no son sencillos. «Llevamos año y ocho meses tratando de echar a una que no paga el alquiler a una viuda que cobra 600 euros de pensión y para quien alquilar su segundo piso supone su mayor ingreso. El contrato está a nombre del ex de la chica que ahora vive en la casa. Como sabe de nuestras acciones, en julio y agosto puso la calefacción, que paga mi clienta», comparte otro procurador.