Un pasajero roba las llaves del autobús Santander-Logroño al llegar a la estación de Vitoria

Era el colofón a un viaje de lo más movidito. Y eso que todo transcurrió por los cauces habituales hasta que en Laredo, la primera parada del trayecto, se subió un grupo de «unos ocho-nueve chavales». Su comportamiento debió distar bastante de las pautas mínimas de civismo. «Dieron el viaje al resto de pasajeros y a la conductora», deslizan fuentes internas de la Ertzaintza.

Al parecer, hubo un «altercado importante» cuando el autobús alcanzó Bilbao. Quedaba una última parada previa antes de enfilar su destino definitivo. Sobre las 21.30 horas, el vehículo pesado accedió a la estación ubicada en el barrio vitoriano de Lakua.

Se detuvo en su andén sin mayor complejidad y parte de los pasajeros descendió. Entre ellos, la cuadrilla de ocho-nueve jóvenes que tantos quebraderos de cabeza había originado al resto de viajeros.

Durante la operación de descarga de maletas, una testigo vio cómo uno de los chicos metió su mano por la ventanilla de la chófer, que en ese momento andaba ayudando a otros viajeros. Acto seguido, la cuadrilla desapareció de la terminal.

Pronto se descubrió el porqué del movimiento del joven. Resultó imposible arrancar el autobús al faltar las llaves. A partir de ahí, la Ertzaintza se hizo cargo del asunto. Patrulleros buscaron por los alrededores a los sospechosos. A su vez, la compañía tuvo que poner otro autocar para el pasaje varado en Lakua. Ya de madrugada, las pesquisas de los agentes de la Policía autonómica dieron fruto. Localizaron al autor material. Éste confesó haberlas tirado en un matorral cercano al edificio. Allí las recuperaron.

El expediente por este caso será remitido a las autoridades judiciales de la capital alavesa para que se evalúen las posibles responsabilidades legales del autor del hurto.