«Parecían rocas en vez de granizo, daba miedo»
El episodio de pedrisco destrozó árboles y anegó calles en los diferentes barrios. Cayó con especial virulencia en los de la zona Sur y Este
«Está todo destrozado». Los diferentes barrios de la capital alavesa ofrecían un panorama desolador tras la brutal granizada caída pasadas las ocho de la tarde de ayer. Vehículos abollados y con las lunas rotas, calles igual que «piscinas» llenas de grandes balsas, garajes anegados, árboles hecho añicos… Por toda la capital, los vecinos aseguraban no haber visto nada igual desde hacía más de diez años, y se remontaban al similar episodio acaecido en 2009, también en julio.
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Salburua
«Se han formado ríos que no había visto en la vida»
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Ariznabarra
«Los árboles se han quedado destrozados»
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El Batán
«Parecía que iba a estallar la luna del coche»
El BEI, cuyo recorrido discurre por esta zona de la capital, tuvo que detenerse durante más o menos diez minutos. La lluvia de 'piedras' avanzó hacia Adurza, donde además de destrozar ramas de árboles y provocar numerosas balsas rompió las claraboyas de los tejados. Cuando amainó, los conductores que estaban dentro de los coches comprobaron los daños. Todo el mundo sacaba fotos para enviar a los seguros. También en Mendizorroza, en el polideportivo, «parecía que se iba a hundir el techo». El fuerte sonido del impacto del granizo en la cubierta, donde se celebraba el Festival de Jazz, asustó a los espectadores que se encontraban en su interior, donde se coló algo de agua. El episodio obligó a retrasar el inicio de los conciertos.
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Lakua-Arriaga
«Los sumideros se han atascado totalmente»
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Ensanche
«El local parecía una piscina, hemos tenido que achicar»
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Casco Viejo
Miradores reventados y macetas caídas
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Zabalgana
«Hay grandes balsas y las carrocerías están abolladas»
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Abetxuko
«No ha caído como en otros barrios, solo hay charcos»
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