Un operario revisa una instalación telefónica en el Casco Viejo. Rafa Gutiérrez

Ninguna empresa quiere llevar la fibra óptica al Casco Viejo de Vitoria

Queda desierto el concurso para el que el Ayuntamiento reservaba 150.000 euros y que iba a mejorar la conexión por internet de una treintena de portales y locales

Viernes, 18 de julio 2025, 00:18

. El contrato de las obras para la ejecución de acometidas de telecomunicaciones y conexión a la red principal en el Casco Medieval de Vitoria, ... que se licitó en mayo por 150.000 euros, será declarado desierto hoy. El punto 18 del orden del día del Consejo de Gobierno Local lo deja claro: ninguna empresa quiere hacerse cargo de llevar la fibra óptica a esos cerca de 300 residentes, comerciantes y hosteleros del Casco Viejo que desde septiembre de 2023 sufren su propio 'apagón' digital. Al menos no por ese dinero.

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En febrero parecía que la llegada de la fibra óptica al Casco Viejo pisaba el acelerador cuando la concejala de Espacio Público, la peneuvista Beatriz Artolazabal, anunciaba que contaba ya con una partida para poder licitar «en breve» los trabajos y que la fórmula de contratación empleada sería similar a las de la BAI (Brigadas de Acción Inmediata). Se trataba de un acuerdo pactado entre PSE-PNV y EH Bildu cuando negociaron el presupuesto de 2025. Artolazabal anunció entonces que se había ya pedido permiso a las empresas de telefonía para acceder a las canalizaciones y poder llevar el cable desde las redes centrales hasta los portales. Se hablaba de llegar a una treintena de localizaciones.

Portal a portal

La primera teniente de alcaldesa calculó que la inversión necesaria para estas acometidas es de entre 4.000 y 4.500 euros por bloque y luego cada vecino debía costearse la toma desde la arqueta hasta su casa. Para ello, recordó, hay una línea de ayudas a la rehabilitación de la sociedad municipal Ensanche 21 a la que debían apuntarse.

Los vecinos hicieron su parte, convencidos de poder por fin dejar de tener que depender de la conexión vía radio, una alternativa que se encuentra condicionada a la cobertura de la red móvil y de menor calidad que la fibra óptica. La empresa que se adjudicara el contrato disponía de hasta un año de plazo para ejecutar los trabajos.

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El cierre de la central de Telefónica en Zaramaga encargada de alimentar a la 'almendra' y zonas aledañas obligó a hogares y establecimientos a migrar a la red que ofrece una navegación más rápida. Esta tecnología, básica para poder trabajar o hacer uso de internet con una mínima calidad, sigue ausente en unos 300 comercios y viviendas.

El motivo de este 'apagón' es que el Casco Medieval carece de la infraestructura necesaria para llevar el cableado hasta las viviendas. Esto afecta a diversas manzanas en calles como Herrería, Zapatería, Las Escuelas o Pedro Egaña. Además, el actual PERi del barrio veta el cableado aéreo, una solución más sencilla. Las empresas de telefonía se han desentendido.

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