Agresión sexual en Vitoria
«Mamá, el señor que vive con nosotras en casa me ha estado tocando»El Juzgado de Instrucción 1 envía a prisión a un hombre de 44 años acusado de agredir sexualmente a la hija de 11 años de su compañera de piso en Vitoria
Un vecino de la capital alavesa, de 44 años, ingresó a última hora de la mañana de ayer, domingo, en el centro penitenciario de Zaballa. Lo hizo en calidad de preso preventivo bajo una grave acusación: un delito de «agresión sexual a menor de 16 años». La jornada anterior, la Ertzaintza le detuvo como sospechoso de haber abusado de una niña de tan sólo 11 años y residente en el domicilio en el que le abrieron las puertas hace apenas un par de meses. La otra inquilina es la madre de la pequeña.
Según ha sabido este periódico de fuentes internas de la Ertzaintza, este hombre nacido en 1978 –es decir, que cuadruplica en edad a su víctima– aprovechó un rato que se quedaron a solas. Está procesado por realizarle tocamientos sexuales «muy graves», deslizan los medios consultados. El incidente ocurrió hace unos días, cuando el adulto se llevó a la menor a una habitación sin más testigos.
Se produjo en un momento en que el adulto se quedó a solas con la pequeña
El ataque
Con lo que no contaba el ahora reo preventivo es que la pequeña, preocupada por lo sucedido, se lo reveló a su madre, también residente en ese domicilio. «Mamá, el señor que vive con nosotros me ha tocado», refirió la pequeña. A partir de esta confidencia, la progenitora se puso en contacto con la Policía autonómica. Pronto, agentes de la comisaría de Portal de Foronda localizaron y detuvieron a este adulto.
Es el único sospechoso de esta causa ahora en fase de instrucción. Por las pesquisas policiales realizadas con el adulto y la menor se cree que se produjo un único ataque sexual. «En este tipo de delitos a menores de edad, desgraciadamente suele ser demasiado habitual que pasen meses, y a veces años, hasta que la víctima se decide a contar lo que le está pasando», describen agentes consultados. «Unas veces porque no son conscientes de lo que les están haciendo y otras, por las amenazas lanzadas por el adulto», concluyen.
«Lagunas por el alcohol»
¿Y alegó algo este hombre? Su versión de los hechos, deslizan las mismas fuentes, sería que «el día que ocurrió la supuesta agresión sexual abusó seriamente del alcohol, lo que le provocó que tenga lagunas y que no recuerde por qué se acercó a la pequeña, ni todos los detalles sobre lo ocurrido».
Porque, en un principio, sí admitió «algún tocamiento». No obstante, esa declaración inculpatoria carecerá de validez hasta que la ratifique durante la celebración de un juicio penal. Por la gravedad de la acusación, esa vista oral probablemente se celebre en la Audiencia Provincial de Álava dentro de un par de años.
Ante el riesgo de fuga y que el sospechoso admite parte de los hechos se decreta su pase a Zaballa
El juzgado de guardia
En la mañana de ayer, domingo, fue trasladado al Palacio de Justicia de la Avenida de Gasteiz. Después de prestar declaración y, ante el riesgo de fuga –por su origen extranjero– y su autoinculpación parcial, desde el juzgado de guardia, Instrucción número 1, se decretó su ingreso preventivo en el centro penitenciario de Álava.
