Enrique Barbadillo, del PNV, anuncia su dimisión como alcalde de Treviño
El jeltzale deja el cargo «por motivos personales y de salud» y previsiblemente le sustituirá su compañera Amaia Cadavid
Un nuevo movimiento se producirá en los próximos días en la convulsa legislatura del Ayuntamiento de Treviño. Su alcalde, el jeltzale Enrique Barbadillo, ha anunciado ... que dimitirá por «razones familiares y de salud». Lo hace cuando apenas queda un año para la conclusión del mandato y es previsible que le sustituya en el cargo su compañera de partido Amaia Cadavid, primera teniente de alcalde.
Cadavid entró en el Ayuntamiento en febrero del año pasado para sustituir a su compañero Mikel López de Munain, que presentó su dimisión «por disconformidad con parte de la coalición de gobierno», aunque Barbadillo aseguró entonces que se trataba de razones personales. El alcalde renunciará también a su acta como concejal y será sustituido por Rubén Etxebarria.
Los encontronazos en el seno del equipo de gobierno, integrado por PNV y la Agrupación Independiente Condado de Treviño, se han repetido a lo largo de toda la legislatura. Hasta el punto que este mismo año, en el mes de febrero, Yolanda Urarte, portavoz de los independientes y responsable de Medio Ambiente y Sostenibilidad en el Ayuntamiento, pidió en el pleno la dimisión del alcalde. La petición sin embargo, no llegó a romper la coalición y la tensión se rebajó en posteriores reuniones, pero las discrepancias entre los dos grupos venían de lejos.
Estabilidad
Barbadillo llegó a la alcaldía tras las elecciones de 2019 gracias al acuerdo con los independientes y EH Bildu tras un ajustadísimo resultado. Esa correlación de fuerzas se mantendrá previsiblemente para respaldar a la nueva alcaldesa, dado que Treviño entró en el acuerdo post electoral para las alcaldías de Laguardia y La Puebla de Arganzón por el que PNV y EH Bildu se apoyaban mutuamente para conservar estas alcaldías.
Tras su anuncio, el primer edil espera que el relevo se produzca en los próximos días con tranquilidad y confía en que «se puedan seguir desarrollando proyectos». Entre sus logros, destacó, «hemos logrado inversiones para los pueblos, y estamos poniendo en marcha otro plan del euskera para sustituir al que nos tumbó el Juzgado de lo Contencioso de Burgos».
En opinión de Barbadillo, la pandemia ha condicionado la gestión del municipio, ya que se han limitado los avances en lo que se refiere a la integración en Álava. A eso une «que somos un Ayuntamiento con nueve concejales y seis grupos políticos entre los que ha habido una convivencia difícil».
El anuncio de dimisión ya ha despertado reacciones. El edil de Condado para Todos, Roberto Bajos, reclamó la dimisión «cuanto antes, porque ha sido una legislatura desastrosa. No se han celebrado reuniones con las instituciones castellano leonesas ni con las alavesas y ahora, se ha convocado la primera reunión de la comisión de integración, después de tres años». Bajos ya propuso al resto de la Corporación presentar una moción de censura para apoyar «a cualquier otro candidato», pero la propuesta no fraguó, pese a que «no han mejorado los convenios para lograr más servicios». También recordó que en julio pasado, las familias de Treviño se movilizaron para reclamar servicios dirigidos a menores en las plazas del pueblo, en el colegio y los locales municipales y añadió «los más de 10.000 euros gastados en juicios perdidos por temas urbanísticos».
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