El inesperado hallazgo de un mojón durante las obras del río Batán en Vitoria

Un inesperado hallazgo se ha producido durante las obras de acondicionamiento de la margen derecha del río Batán, en las calles Salvatierrabide y Zumabide. Días pasados, los operarios encargados de la limpieza de la zona fluvial se toparon con un monjón en cuya piedra aparecen escritos los nombres de dos pueblos del Ayuntamiento de Vitoria, Arechavaleta y Gardélegui. Se desconoce el lugar de origen del hito de piedra, que por supuesto indica un punto de delimitación de ambos términos inicialmente, el indicador rural fue apartado entre los escombros, piedras y maleza, retirados de la orilla del cauce y posteriormente trabajadores del Consistorio lo han llevado a dependencias municipales para su posterior reposición en el lugar que debería estar.

Las obras acometidas en el Batán, un río de pequeño caudal que entra en Vitoria por el sur y que en épocas de lluvias intensas ha llegado a provocar inundaciones, pretenden evitar que en el futuro se produzcan crecidas con riesgo de desbordamiento. La Agencia Vasca del Agua (URA) y el Ayuntamiento se han encargado de la restauración de la margen derecha con un presupuesto de 18.150 euros. Ya están terminadas.

En el lugar, después de removida la tierra, piedras y arbustos, han salido a relucir también restos de una antigua fábrica que hubo junto al cauce. Se han conservado unos arcos en ladrillo de esa antigua factoría, aunque se han demolido los muros superpuestos. URA se ha encargado de la demolición de los muretes y de la retirada de los escombros.

El Ayuntamiento, por su parte, se ha responsabilizado de la gestión de los restos y de la limpieza de los residuos sólidos urbanos localizados en ese espacio de la ciudad. La Agencia Vasca del Agua ha acondicionado el terreno para que en el futuro el Consistorio vitoriano habilite una senda peatonal en paralelo al río Batán.

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