El hombre que violó, golpeó y robó a su sobrina en Vitoria durante 3 décadas por fin irá a prisión

Ese hombre recogerá a finales de la próxima semana su citación de entrada en la cárcel de Zaballa tras agotar todas las vías procesales posibles. Fue condenado a un global de 17 años por la Audiencia Provincial de Álava en abril del año pasado y recurrió. El Tribunal Supremo desestimó hace unos días su última bala. Esa resolución ha llegado ya al Palacio de Justicia, por lo que la sentencia por un «delito continuado de agresión sexual» y otro «continuado de robo con violencia o intimidación» ya es firme.

Su encarcelamiento llegará «entre tres y cinco días después de recoger el mandamiento», deslizan medios judiciales. Así, para el 10 ú 11 de abril debería instalarse en una de las más de 700 celdas de 13 metros cuadrados.

Este hombre nacido en 1958 ocupó el papel de padre ausente de la víctima. Pero desde su infancia hasta su madurez le sometió a toda clase de vejaciones. Desde violaciones a exigirle pequeños pagos de dinero cuando ella se incorporó al mercado laboral. «En ocasiones, ésta se lo entregaba para evitar ser agredida».

La víctima calló durante años. Nadie en su entorno se dio cuenta del tormento. Ni siquiera cuando empezó a desfilar por un rosario de especialistas médicos por anorexia, desequilibrios mentales... Estuvo varias veces en el psiquiátrico. Con el paso del tiempo, expertos médicos determinaron que fue su mecanismo de defensa para tratar de «ahuyentar» a su maltratador.

Su tío siempre ha negado ataque alguno. Desde la primera denuncia –en 2020– hasta el juicio en el que recibió la condena que ahora deberá cumplir, la Audiencia le sentenció en abril del año pasado. Es más, siempre cargó contra su sobrina, a la que acuso de inventarse esta historía.

Sí es cierto que esta mujer ha dado versiones diferentes de los hechos, aunque el Supremo lo minimiza. «Hemos precisado en numerosas ocasiones que la persistencia (en el relato) no exige una repetición mimética, idéntica y literal, sino la ausencia de contradicciones en lo sustancial y en lo relevante», dice su auto.

Cabe recordar que la propia hija biológica de este hombre testificó en su contra durante el juicio desarrollado en Vitoria. Contó que también le sometió a un ataque sexual cuando sólo tenía 9 años, aunque jamás haya denunciado. Luego, cuatro peritos corroboraron el testimonio de la víctima principal, sometida desde los 12 años y hasta pasados los cuarenta. De ahí la severa petición de cárcel solicitada por el fiscal Fidel Cadena y la acusación particular, a cargo de la abogada Sara Lorenzo aceptada casi en su totalidad –pidieron 18 años– por el autor de la sentencia original, el magistrado Jesús Poncela.

Expertos médicos aseguraron que esta mujer sufrirá «secuelas de por vida». Por de pronto, su entorno cuenta los días para que su verdugo cruce el umbral del penal alavés de Zaballa. Aparte de que deberá indemnizarla con 20.000 euros, la Justicia le prohíbe contactar o acercarse a su sobrina durante los próximos 27 años.