Un hombre ebrio que arrolló a un niño en Vitoria, primera condena por mal uso del patinete
Abona una multa de 540 euros al juzgado e indemniza con otros 1.800 euros al menor, que recibió varios puntos en la cabeza
David González
Domingo, 19 de febrero 2023, 00:54
Un joven que conducía ebrio un patinete eléctrico se ha convertido en el primer alavés en recibir una condena penal por su uso incorrecto. Según ... ha sabido este periódico de fuentes judiciales, esta persona provocó un accidente cuando circulaba por una acera del barrio de Adurza. Arrolló a un niño de seis años, quien salía de un bar cercano en dirección a la mesa de la terraza donde departían sus padres. A consecuencia del impacto, el menor sufrió una herida en la cabeza. Le dieron varios puntos de sutura. La pena fijada por este «delito de lesiones cometidas por imprudencia grave» asciende a una multa de 540 euros más una indemnización a la víctima de 1.800 euros, dinero ya consignado por el sentenciado.
Hace unos días, el Juzgado de lo Penal número 1 de Vitoria revisó este episodio, fechado una noche de julio de 2021. No había duda alguna sobre la autoría. Tampoco respecto al estado etílico del conductor del vehículo particular. Efectivos de la Policía Local desplazados al lugar del siniestro le sometieron al alcoholímetro, donde quedó retratado. En la primera prueba arrojó una tasa de 0,64 miligramos por litro en aire espirado. En la segunda, realizada tras quince minutos de espera, bajó a 0,59.
«Al no tratarse de un vehículo a motor o un ciclomotor, esa medición por encima de los límites establecidos hubiera supuesto una sanción administrativa, pero en este caso lo importante son las lesiones causadas por su imprudente manera de conducir», trazan fuentes internas de la comisaría de Aguirrelanda. En este sentido, el fallo de la magistrada Beatriz Román estima que circulaba a los mandos del patinete «sin la diligencia y precaución necesarias», aparte de que su transitar «por la acera de forma antirreglamentaria» supuso «otra infracción» extra.
Cabe recordar que, debido al golpe recibido, el menor sufrió «una herida inciso contusa en la zona parietal» de su cabeza. Tuvieron que colocarle grapas de sutura y tardó en curarse «ocho días, uno de ellos incapacitante y sin que resten secuelas».
Acuerdo entre las partes
La vista oral se celebró a mediados de enero en el Palacio de Justicia y duró más bien poco. En gran parte porque el encausado presentó el comprobante del pago de 1.800 euros a la familia del pequeño, acometido tan sólo cuatro días después del altercado en Adurza. De esa cantidad, «276 euros correspondieron a la responsabilidad civil por la sanidad de sus lesiones y el resto, por los daños morales que pudiera haber ocasionado».
Esa muestra de buena voluntad, unida a la falta de secuelas en la víctima, facilitó un acuerdo previo entre el abogado defensor y la Fiscalía. A cambio de aceptar su responsabilidad en el delito de lesiones por imprudencia grave –que «en el supuesto de haberse celebrado el juicio jamás hubiera implicado su entrada en prisión»–, la jueza le impuso además una multa de 540 euros y el pago de las costas de este proceso penal. Y, sin pretenderlo, le erigió en pionero de una nueva lista negra.
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