Hallan en Vitoria una granada inutilizada que viajaba en un paquete a Alemania
Las alarmas saltaron el 22 de noviembre en el centro logístico de Correos del polígono industrial de Júndiz. El artefacto tiene consideración de arma de guerra
Miembros de la Intervención de Armas y Explosivos de la Comandancia de la Guardia Civil de Álava detectaron en fechas recientes en Vitoria una granada de fragmentación modelo 9N235 en el interior de un paquete postal detectado en Júndiz. Este grupo ha trabajado en estrecha colaboración con el personal de seguridad privada y con el Equipo de Desactivación de Explosivos de la Comandancia de Bizkaia. El artefacto, de fabricación rusa, está diseñado para «atacar a personas y vehículos sin blindaje» y se está empleando actualmente en la guerra de Ucrania. La granada se encontraba desprovista de la mayor parte de su carga explosiva, según ha informado este lunes el Ministerio del Interior.
Aun así, tiene la consideración de «arma de guerra» y, por tanto, se procederá a denunciar administrativamente a las personas responsables del envío. El hallazgo puede llegar a implicar una sanción de entre 601 y 30.000 euros. En caso de tener dudas sobre la legalidad de la tenencia o el envío de este tipo de material, se recomienda a la ciudadanía ponerse previamente en contacto con su Intervención de Armas y Explosivos más cercana, donde les facilitarán toda la información que precisen.
Las alarmas saltaron el pasado 22 de noviembre en el centro logístico de Correos que se ubica en el número 3 de la calle Luzuria, en el polígono industrial de Júndiz, en Vitoria. Los escáneres detectaron contenido sospechoso en un paquete con destino a Alemania, con un peso cercano a los dos kilos, en los que el remitente aportaba una descripción que se refería a diversas piezas de ropa. Lo llamativo es que se apreciaba también un texto y una imagen en la que se hacía referencia al conflicto en Ucrania y, más en concreto, a un episodio que se produjo en abril del pasado año: el hundimiento del crucero 'Moskva', buque insignia de la armada rusa en el mar Negro, que quedó destruido por el impacto de un misil Neptuno del ejército ucraniano.
Inmediatamente se solicitó la presencia del GEDEX (Grupo Especial de Desactivación de Explosivos) de la Guardia Civil del País Vasco. El artefacto que hallaron, una granada mortero 9N235 de fabricación rusa y diseñada para atacar a personas y vehículos con cierto grado de blindaje y, a priori, prohibida por los tratados internacionales. La pieza parecía inutilizada pero se hacía necesario comprobar el nivel de material explosivo que contenía. En su exterior se podía leer la incripción 'YKPAYHA' (Ucrania) en ucraniano, simulando la forma de un corazón.