González defiende que Álava parte en mejor situación que otros territorios para la recuperación
El diputado general asegura que la fiscalidad de las empresas no se tocará para poder mantener los servicios públicos y la cohesión social
Mismo diagnóstico, pero un tratamiento distinto. El diputado general reconoció ayer que Álava vive «una situación muy complicada», como alertaron el domingo en EL CORREO ... doce líderes económicos del territorio, pero discrepa en la receta que estos propusieron. A la principal demanda de introducir modificaciones en los planes de ayudas para favorecer al tejido económico, Ramiro González respondió que estas ya se «consensúan» con los sectores afectados y descartó la posibilidad de realizar una reforma fiscal con el fin de mantener servicios públicos de calidad y cohesión social.
El máximo dirigente foral dijo ser consciente de ese «futuro incierto» que dibujan los líderes empresariales, pues con algunos de ellos se ha reunido en las últimas fechas y principalmente con motivo de la invasión de Ucrania, cuando los problemas se han agudizado. Tiró de datos para defender que la provincia cuenta con más trabajadores que antes de la pandemia y el número de compañías instaladas aumentó en el último ejercicio. «Si Álava no está en buenas condiciones teniendo el mayor salario medio, el PIB 'per capita' y PIB industrial, ¿quién lo estará? ¿Qué dirán otros territorios? Los datos son objetivos y nos permiten afrontar el futuro desde el esfuerzo y el compromiso, que van a ser necesarios, pero también buenas condiciones», cuestionó. «Somos un territorio atractivo que se enfrenta a esta situación desde una alta competitividad», insistió.
Sobre la demanda de rebajas fiscales que ha defendido SEA, González lo descartó. «Yo hablo con empresarios y escucho muchas voces distintas. Tenemos un país con un amplio consenso en demandar servicios públicos de calidad y cohesión social», comentó antes de señalar que algunos responsables empresariales le han transmitido en privado el objetivo de que se construya una «sociedad en la que merezca la pena vivir no sólo para los que tengan mucho, sino para todos».
En lo que sí que coincidió con líderes empresariales, como Gregorio Rojo (presidente de la Cámara de Comercio de Álava), es reanalizar la estrategia industrial y adaptarla a los nuevos tiempos. «Es necesario un gran acuerdo social que facilite la transformación que debe afrontar nuestra industria. Estamos en el momento de avanzar en la digitalización, la diversificación, la transición energética y las nuevas actividades económicas. Esto va a exigir grandes inversiones», aseguró.
En lo más inmediato, Ramiro González propuso un «pacto de rentas» para repartir los sobrecostes de combustible y materias primas entre distintos sectores.
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