Educación planea hacer reformas interiores en la escuela de FP de Llodio

El edificio de FP de Llodio necesita una remodelación en profundidad y el departamento de Educación del Gobierno Vasco tiene previsto «realizar reformas interiores». De momento, se desconocen los detalles de las obras que se van a realizar, aunque desde el departamento de Cristina Uriarte, se ha adelantado que no se ejecutarán hasta el curso 2022-2023. De momento, tiene que redactarse el proyecto, que podría comenzar en breve, pero el inicio de ese trabajo, todavía no tiene fecha. Otro de los detalles que sí han avanzado desde el departamento de Educación es que «no está previsto ningún traslado» que afecte a las aulas.

El edificio presenta varias deficiencias. Una de las más graves es que carece de ascensor y han sido varios los alumnos que han tenido que renunciar a matricularse en Llodio por la falta de accesibilidad de la escuela, que afecta a todo el edificio, tanto a la parte antigua, como a las ampliaciones posteriores.

La construcción se articula alrededor del edificio principal, que tienen estructura de madera y que mantiene su aspecto original. En realidad, en la última panta, que sirvió de vivienda a los hermanos de la Salle entre 1944 y 1998 cuando abandonaron Llodio definitivamente, apenas se han hecho cambios.

El edificio se inauguró en 1870 y hasta ahora, se ha visto sometido a sucesivas reformas. Una de las más importantes se abordó tras la Guerra Civil, y otra, en 1972, cuando lo que había sido hasta entonces una escuela elemental, se convirtió en Centro de Formación Profesional. «Estas reformas, en los primeros años, son precarias: se derriban tabiques, se levantan otros, se montan entablados para dividir las naves horizontalmente en dos pisos. Se habilitan como aulas y talleres lugares insospechados; el escenario y los camerinos del salón de actos serán el taller de delineación y otras aulas respectivamente. Se construyen módulos desmontables para el taller de automoción, soldadura, mecánica o delineación en los laterales de los patios... », según recoge José Luis García Moyano en su libro 'Escuelas públicas del Valle de Llodio'.

Las inundaciones de 1983 acabaron con parte de la remodelación que se había realizado un año antes proyectada por Uriarte. Desde entonces, se han realizado adaptaciones parciales. Una de las últimas, se ha abordado para este curso y ha sido responsabilidad del Gobierno vasco, una vez que el centro dejó de ser de titularidad municipal y entró a formar parte de la red pública en 2017. La inversión, de más de 100.000 euros, ha permitido convertir varios espacios del segundo piso en un aula Ethazi donde se ofrece formación a varios cursos de los ciclos eléctricos y comparten espacios en los que pueden estudiar, hacer trabajos prácticos e incluso relajarse en una zona de descanso.

El centro tiene en la actualidad medio millar de alumnos y casi setenta profesores para impartir clases de Bachiller, ciclos de grado medio y superior de Formación Profesional.