Los clubes alaveses acaban con la huelga y la competición arrancará este fin de semana

Después de muchos años de quejas sin atender, la huelga del fútbol alavés se plasmó el pasado mes de julio, con la unanimidad de los clubes. A partir de ahí, ya tras las vacaciones y el inicio de septiembre, el Ayuntamiento planteó varias propuestas concretas que supusieron un acercamiento. Además de la licitación de los vestuarios de Aranbizkarra, el cambio de las láminas de hierba artificial de Lakua Arriaga y Ariznabarra para la próxima temporada y un plan de inversión anual para que las reformas lleguen a los campos más necesitados.

Pese a que el acuerdo pareció por momentos cercano, los clubes, en una decisión sin precedentes, anunciaron la pasada semana que mantenían la huelga. De esta forma, alrededor de 100 equipos y, por tanto, cerca de 2.000 futbolistas, se quedaron sin partidos. No obstante, aún sin el inicio de las categorías infantiles y, sobre todo, el deporte escolar, entre ocho y doce años, que aglutina más de 4.000 jugadores, alrededor del 40% del total en la provincia. Todos ellos podrán ahora iniciar sus competiciones, que comienzan a partir de octubre.

En principio, los responsables municipales se han comprometido a destinar un millón de euros al año hasta 2022 para la renovación de los campos de fútbol, al tiempo que negociarán con los grupos de la oposición la creación de una dotación económica de 2,5 millones. Otra de las reivindicaciones de los clubes pasaba por la modificación en los horarios de entrenamiento.

Con sus más y sus menos en las negociaciones y todavía múltiples cuestiones pendientes para los próximos meses, los problemas quedaron ayer desbloqueados y el balón comenzará a rodar.