Cientos de alaveses disfrutan de las playas del embalse

La excusa del buen tiempo acompaña cualquier remojo. Pero los motivos van mucho más allá. En las playas de Garaio y Landa, cuya zona de aparcamientos volvió a llenarse, ese pretexto se acompaña de una sensación de seguridad debido a la amplitud de e las campas. Y se ha convertido en un destino de fin de semana repetido en este verano atípico por alaveses, pero también guipuzcoanos y vizcaínos. «Son 140 hectáreas en Garaio (170 sumando Landa)», explican los socorristas acerca de la facilidad para mantener las distancias.

A pesar de ello, pasadas las doce del mediodía de este sábado dos miñones restringieron el acceso a Garaio por el lleno en los aparcamientos y de nuevo hubo conductores multados en Landa. El limpiaparabrisas de al menos una decena de coches sostenía la papeleta con el mismo hecho denunciado: «Turismo estacionado en arcén transitable de vía interurbana».

A Jose Mari y Gemma. Aunque les gustaría pasar unas vacaciones por el mediterráneo, pero de momento las escapadas se limitan a Euskadi. «Hay muchas dudas. Empezamos por aquí…», dicen con esa incertidumbre acerca de las medidas que tomen las diferentes comunidades autónomas si se incrementan los brotes. De ese lado bueno de las cosas habla el vitoriano Juan tras quitarse de encima un rosco inflable. «Muchas veces no disfrutamos de lo que tenemos cerca». Su familia ha convertido en habitual las salidas al pantano esta temporada estival. Su hermana Gloria cuenta que la sensación de seguridad es mayor allí. «Somos socios de la piscinas de Mendi. Pero nos da más cosa. Aquí nos sentimos más seguros», 8uindica. A partir de este lunes, el aforo máximo se amplía en Mendizorrotza y Gamarra pasando de 2.000 a 2.500 personas por turno en cada una de las piscinas.

Otra familia guipuzcoana, de Eskoriatza, eligió el pantano para disfrutar del almuerzo. «Hemos venido porque se está más tranquilo que en las playas», comentan amabilísimos los hermanos Josu, Karmele y Jone acerca de esa ruta por el embalse de Ullíbarri Gamboa. También de Bilbao una cuadrilla descubría Landa ayer mismo. «Son 40 minutos. Lo que puede haber a la playa de Gorlitz. No sabía que en Álava había sitios así», decía Eneko al salir del agua.