Las chinches de la colza invaden el pueblo de San Román de Campezo
Este insecto se alimenta de savia y no de sangre, pero genera molestiasa la ciudadanía. La falta de lluvias contribuye a su presencia
El exterior de varias casas del pueblo de San Román de Campezo, que pertenece al municipio alavés de Bernedo, está repleto de chinches grises. Su origen se encuentra en un cercano campo de colza que ha movilizado a los insectos durante la labranza. Todo se desencadenó el pasado viernes, cuando un vecino avisó sobre la creciente presencia de este bicho que, a diferencia de la chinche de tipo común, no se alimenta de sangre sino de la savia de esta planta que en primavera tiñe de amarillo los campos del territorio histórico.
«La Diputación me explicó que no es la primera vez que se les comunica una situación de este estilo y que no son peligrosas para las personas, sólo generan molestias», explica Xabier Urbina, técnico de Medio Ambiente de la Cuadrilla de la Montaña.
En principio, la solución era voltear la tierra y así se lo comunicaron al agricultor de la colza, que lo realizó inmediatamente. «No han aumentado, pero tampoco se han reducido en número. Se lo hemos comunicado al Gobierno vasco, que no va a actuar porque no se considera una plaga», añade Urbina. La solución está en camino a través de la cooperativa de agricultores, pues van a buscar un producto químico que pueda acabar con estos molestos insectos, aunque todo se aceleraría con unas precipitaciones que no están previstas.