Ver 6 fotos
'Basura espacial', una exposición en Vitoria que pone en valor la vida frente a los conflictos bélicos
El artista David F. Brandon mostrará su trabajo pictórico en la sala Espazioa hasta el 30 de octubre
Ikram El Aarrass Amachraa
Miércoles, 2 de octubre 2024, 15:28
Una pintura que recoge la memoria plástica de lo que estaba ocurriendo a nivel bélico y luchas de poder en los años 70. Eso es ... lo que quiere transmitir David F. Brandon con su trabajo 'Basura espacial', que ha presentado este miércoles en la sala Espazio de la calle Costa Rica, 6. En esta muestra que el artista ha realizado especialmente para la sala de exposición ha trabajado sobre alguno de aquellos motivos o sucesos de aquellos años y los ha cubierto de una pátina de polvo, «quizás cósmico o espacial para alejarlos en el tiempo y situarlos más como en una nube o como en el pasado de la memoria».
El ser humano es volátil, «y ante un dron el valor de su vida no existe». Es lo que ha querido transmitir este artista que reside en Vitoria desde el 1985. Ha realizado exposiciones individuales de pintura en Londres, Liverpool, San Sebastián, Burgos, Pamplona y Vitoria. La obra 'Basura espacial' estará disponible hasta el 30 de octubre.
Uno no puede no relacionar ese escenario bélico de los años 70 con el actual. Así lo ha hecho José Cos, responsable de la sala de la calle Costa Rica. «Tiene mucho que ver con lo que está ocurriendo en Palestina, Gaza, Líbano y el genocidio de Israel». A través de las obras de David F. Brandon en el que se pueden ver satélites en un cielo amplio, la silueta de unos pájaros, la sombra de dos personas conversando, entre otros, pretende plantear «cómo nos situamos los seres humanos en un universo que parece infinito y nos damos tanta importancia a nosotros y a los conflictos cuando en realidad somos una mota de polvo».
Otra de las cosas que también aparece en sus cuadros son los elementos domésticos como pueden ser tubos de ungüento para el cuerpo, pasta de dientes o cremas faciales. «Es una forma de simbolizar el interior de nuestras casas, del concepto del hogar, como una sensación íntima, pero que al mismo tiempo fugaz, porque puede ser fácilmente destruído por los drones que aparecen en los otros cuadros». ha explicado el artista. Eso sí, en la totalidad de sus cuadros los tonos azulados y grises predominan como una metáfora para representar «la robótica vida a la que estamos sometidos».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
