Las alavesas ocupan solo el 14% de los altos cargos y cobran hasta un tercio menos
El informe de AMPEA revela que el 21% de las empresas del territorio cuenta con un 'Plan de igualdad' pese a ser obligatorio
Los datos son reveladores. La igualdad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral es una tarea pendiente, queda camino por recorrer. La Asociación de ... Mujeres Profesionales y Empresariales de Álava (AMPEA) presentó ayer los resultados del estudio 'Mujeres Directivas, Profesionales y Emprendedoras del territorio' en el que se evidencia la existencia del techo de cristal. Solo el 14% de los altos cargos de las compañías del territorio están ocupados por la población femenina.
Las cifras son negativas, pero más aún si se realiza una comparativa. La media en Euskadi está en el 17% y en el conjunto del país en el 14,15%. El único punto donde Álava sí consigue dar pasos, aunque lentos, es el caso de los puestos de presidencia, donde una de cada cinco mujeres -todavía lejos de la mitad- se sitúan al frente de la firma.
Y no es solo que sean menos, es que además también cobran menos pese a ostentar el mismo cargo. Así lo recoge el informe de Ampea, entre los 142 agentes contactados y 259 tablas de datos analizadas. Un director general percibe un salario anual de alrededor de 63.000 euros, mientras que en el caso de ellas este desciende hasta los casi 41.000 euros. Esta balanza se inclina al mismo lado en los diferentes sectores laborales, como comerciante, pescador, operador de maquinaria, o trabajador no cualificado.
El 'Plan de igualdad' es el mecanismo diseñado para encauzar la situación. El Gobierno vasco anunció hace dos años su obligado cumplimiento en aquellas firmas de más de 50 empleados. En ese documento se fijan criterios para la clasificación profesional, promoción, formación, retribuciones u ordenación del tiempo de trabajo. Sin embargo, y como recoge el estudio de Ampea, solo el 21% de las empresas alavesas cuenta con un proyecto de paridad, por debajo de Bizkaia (25%) y Gipuzkoa (27%).
Y además, «cuanto más grande es la empresa, menor es el porcentaje de mujeres trabajadoras». De ahí que una de las alternativas sea emprender un camino propio. El 64% de las empresas creadas el año pasado fue impulsado por una mujer, sobre todo en el ámbito del servicio. Y seis de cada diez puestos de trabajo creados fue femenino. «Esta desigualdad implica pérdida de talento que no nos podemos permitir», advirtió Raimundo Ruiz de Escudero, delegado del Departamento de Alcaldía en Vitoria. «Las mujeres somos un eje catalizador. Necesitamos planes de igualdad en las empresas», pidió Itziar Gonzalo, diputada de Hacienda.
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