«Siempre merece la pena emprender»

Josean Borge tiene ahora 44 años y en marcha dos empresas. Ayer presentó en la Jornada de Juventud y Empleo Gazte Up Data Surf House, un dispositivo integrado en las tablas de surf que mide los cambios del fondo marino para confeccionar mapas destinados a la investigación y que pueden utilizarse en una App móvil. Para animar a los jóvenes a desarrollar sus ideas desveló que «monté mi primera empresa con 23 años», cuando nadie pensaba en ser emprendedor. Él quería ser «empresario y forrarme». Desde entonces ha mantenido una constante, «trabajo duro» para seguir adelante. Después de haber montado cuatro empresas, tiene claro que «si tienes una idea, ponla en práctica, que tienes mucho tiempo para equivocarte, corregir y aprender».

Ése fue uno de los consejos que recibieron los jóvenes que ayer acudieron al Artium. Otros les llegaron de la mano de Javier Yzuel, creador de Food Style, cuyo proyecto estrella son los huevos fritos congelados. «Buscad la opinión de quien os vaya a ayudar», planteó, pero animó a hacerlo fuera del entorno familiar porque «el peso de la familia y los amigos, muchas veces no lo podemos valorar». Realmente, «lo importante es buscar a quien te va a entender», como gente que pertenezca al sector en el que se encuadre el proyecto.

Antes de lanzarse es conveniente «buscar la idea de algo que no esté trillado», afirmó Imanol López, el tercero de los emprendedores de la mesa redonda, que como toda la sesión estuvo presentada y moderada por la periodista Edurne Baz. El cofundador de Gik Blue, un vino azul, expuso también que la edad no debe ser un obstáculo: «Tengo 29 años y soy el mayor de mi empresa», explicó a modo de ejemplo. Antes de llegar a este proyecto, que crearon cinco socios, participó en otros a través del formato Junior Empresa.

Charla con voluntarios

Algunos de los jóvenes asistentes a la jornada ya tienen una idea para poner en marcha. Es el caso de Nora Kortaberria, que presentó el proyecto que está desarrollando junto a otros quince emprendedores. Ella lo contó al ofrecerse como voluntaria ante la petición realizada por Paco Rodríguez, director de Media Training&Consulting, que ofreció la charla Pitching: cómo vender tu producto en cinco minutos.

Rodríguez presentó como primera premisa la necesidad de sintonizar con la persona a la que se le va a vender el producto. Atribuyó una notable importancia al lenguaje corporal y resaltó la importancia de la preparación porque «si domino mi proyecto, confío en mí». Pero, ojo, la presentación debe realizarse «con un mensaje breve que genere interés para que me hagan preguntas». Fueron algunos de los consejos que ofreció en una sesión en la que animó «a pensar siempre en positivo y en presente».