Terrazas se desmarca de la tónica en Segunda y entrena con público

Es una forma de trabajar, en todos los sentidos, peculiar. Desde que llegó a Anduva sorprendió porque se desmarca de lo que es habitual en una categoría tan profesionalizada como es la Segunda División, donde se esconden al máximo los detalles y el trabajo que desarrollan los protagonistas en algunos entrenamientos diarios. El Córdoba de 'Chapi' Ferrer entrenará hoy con presencia de aficionados, pero ayer se ejercitó a puerta cerrada con el fin de preparar acciones relacionadas con la estrategia y con los mecanismos para contrarrestar al Mirandés.

Es lo habitual en todos los adversarios que se miden a los rojillos. Uno o dos días sin público ni medios de comunicación es la tónica general, una media que se suele ampliar en función de la situación clasificatoria y de las exigencias que presenta el oponente. Cuanto más acuciante sea, más cartas se esconden.

Pero eso es algo que no va con el libro de estilo de Carlos Terrazas. Desde que aterrizó en Anduva dejó claro que no le importaba la presencia de aficionados. Ni en el anexo ni en el propio Anduva ni en el campo del polideportivo, que es donde entrena el equipo una vez a la semana para ensayar la estrategia y, en algunas ocasiones, las jugadas a balón parado.

Su ideario futbolístico en lo que concierne a las sesiones comienza con la charla previa, donde desmenuza diferentes cuestiones de la sesión, lo que quiere para la actividad específica y, por ende, para el encuentro del fin de semana. Sesiones cortas -tres cuartos de hora es lo normal- y una pequeña charla final. Aparte de esto, no duda en mantener conversaciones durante mucho más tiempo con los jugadores a nivel personalizado.

La Liga encara su recta final al quedar poco más de mes y medio de competición, los equipos entran en la fase decisiva, la que determina la posición que ocupará cada uno en la clasificación, pero la tónica sigue siendo la misma. Trabajo en público. Las indicaciones, exhaustivas eso sí, se quedan en el vestuario.

El rival que más se reforzó

Este plan de trabajo es el que mantiene de cara al choque que se jugará mañana. Ante un adversario que presenta novedades con respecto al equipo que se presentó en Anduva hace ya cinco meses. La trayectoria irregular que seguía el Córdoba originó que en la entidad andaluza apostasen por reforzar la plantilla con el objetivo de cumplir el reto de jugar el 'play off' de ascenso, una aspiración que hace un par de meses llevaba camino de esfumarse en la capital andaluza y que ahora, con 'Chapi' Ferrer en el banquillo, se ha retomado.

La tropa blanquiverde presenta novedades respecto al equipo que perdió en la primera vuelta en Miranda por 3-1. Al margen de los jugadores que fueron de la partida en Miranda y que no podrán repetir frente a la escuadra rojilla por lesión o sanción (el portero Saizar, Caballero y Pelayo, todos titulares en el municipal) la entidad cordobesa realizó seis incorporaciones.

López Garai (del Sporting) fue el más tardío en recalar, en marzo. No podrá jugar por lesión, al igual que Obiora, otro refuerzo invernal. Es internacional nigeriano y su último destino fue el Cluj rumano. Adrián Gunino se convirtió en el quinto fichaje del Córdoba. El internacional uruguayo actúa como lateral y llegó en calidad de cedido con opción a compra.

Se hizo con los servicios del delantero Arturo Rodríguez y de los centrocampistas Juanlu y Nieto. Fue el equipo que más se reforzó para intentar jugar la fase de ascenso.