Barakaldo salda su deuda con las comunidades de vecinos

Este año que empieza el Ayuntamiento de Barakaldo prevé hacer frente a la deuda que la sociedad urbanística Eretza tiene contraída con las comunidades de propietarios. El retraso en el pago de las ayudas que la entidad municipal concede por la rehabilitación de fachadas y la instalación de ascensores supera los 444.000 euros y afecta a un total de 44 comunidades de vecinos: 310.000 euros relativos a la colocación de elevadores y el resto -más de 124.000- por la reforma de los inmuebles. El alcalde, Alfonso García, ha enviado una carta a los afectados en la que se compromete a llevar al Pleno la aprobación de los créditos necesarios a para abonar las subvenciones durante el presente año. «Me siento en la obligación moral de buscar una solución», defiende el regidor en la misiva.

Hace dos semanas, el PP de Barakaldo alertó de este retraso en el impago de ayudas concedidas por Eretza y denunció que el actual proyecto de presupuestos elaborado no contemplaba una partida suficiente para hacer frente a la deuda. Entonces los populares cifraron a las comunidades afectadas en más de un centenar, algunas desde el año 2008, y calcularon que las subvenciones pendientes de pago rondaban los 1,6 millones de euros.

En el Consistorio fabril corrigieron estas cifras y destacaron que todavía existen subvenciones pendientes de ser aprobadas por el Consejo de Administración de Eretza, por lo que estos casos aún no han generado la obligación de ser abonados. Según razonaron, algunos de los expedientes abiertos pueden referirse a obras que finalmente no se han llevado a cabo o que no cumplan todos los requisitos exigibles, como por ejemplo disponer del visto bueno por parte del Gobierno vasco en el caso de la rehabilitación de edificios. «También puede haber casos en los que el coste final de la obra no alcance el 100% de lo subvencionable, porque la ordenanza recoge que Eretza abona hasta el 20% del presupuesto con un máximo de 10.000 euros. Por eso, no hay un cálculo fidedigno de la cuantía abonable de las peticiones de ayudas pendientes de analizar», agregaron.

Menos ingresos

En la carta enviada a los vecinos, el alcalde de Barakaldo alerta sobre las dificultades económicas que atraviesa Eretza y que hunden sus raíces en la crisis por la que atraviesa el país, «y que ha tenido una especial repercusión en el sector inmobiliario» con la consecuente «caída en la venta de viviendas». Según revela, «ello ha provocado que Eretza haya dispuesto estos últimos años de menos ingresos de los esperados, llegando a contar con más solicitudes de subvenciones que presupuesto disponible».

En el escrito que ya ha empezado a llegar a los propietarios de las viviendas García agradece su esfuerzo por «mejorar su patrimonio inmobiliario y colaborar así en la transformación urbana de Barakaldo». En cualquier caso, desde el Consistorio también recordaron que la propia ordenanza que regula la entrega de las ayudas informa de que éstas se concederán siempre que sean aprobadas por el Consejo y exista consignación presupuestaria suficiente, «algo que no se ha producido», subrayaron.