Sorprenden a cinco menores que hacían pira en Sestao por la llamada de un vecino

La llamada de un vecino de Sestao acabó el pasado jueves con los planes de cinco menores de 14 y 15 años, que fueron sorprendidos en la calle a las 11.15 horas, en pleno horario lectivo. Un representante de la asociación de vecinos Txabarri Garbi dio la voz de alarma y dirigió a la Policía local hacia el grupo de adolescentes, a quienes había visto entrar en una vivienda con productos de alimentación. Al llamarles la atención, relató este testigo, los adolescentes le respondieron que estaban en la hora del recreo. Pocos minutos después, dos patrullas se personaron en el domicilio, donde descubrieron a los jóvenes.

Los agentes procedieron a la identificación de los tres chicos y las dos chicas que se encontraban en el interior de la casa y se pusieron en contacto con sus tutores para informarles de la situación. Una de las muchachas trató de mentir a los policías con datos falsos, y la otra menor, que, al parecer, «falta a clase con asiduidad», podría ser derivada a la Fiscalía, según informaron fuentes municipales. Acto seguido, fueron trasladados en coches patrulla a sus respectivos centros de enseñanza. Los chavales son alumnos de un instituto de la localidad fabril y las jóvenes estudian en el barrio bilbaíno de Santutxu.

Informes mensuales

La Policía local remitirá ahora un informe detallado del caso al Departamento de Acción Social para que intervenga cuanto antes, advirtieron desde el Ayuntamiento de Sestao. En estos casos, explicaron, los trabajadores sociales se ponen en contacto con el centro de enseñanza y con la familia para investigar si las faltas de asistencia a clase se producen con frecuencia y si, además, existen problemas familiares. En caso de detectar alguna anomalía, inician «una intervención en red en el seno del domicilio familiar».

Según indicaron desde el Consistorio, a veces reciben avisos ciudadanos sobre niños pequeños que se encuentran en la calle, pero la edad de escolarización obligatoria comienza a los 6 años, con el primer curso de Educación Primaria. La obligatoriedad se prolonga hasta 4º de ESO, a los 16 años, si bien un estudiante puede cumplir esa edad y abandonar el sistema sin haber acabado la Educación Secundaria como consecuencia de repeticiones de curso.

La comunicación con los colegios e institutos sestaoarras es fluida, aseguraron los responsables locales, ya que todos los meses los propios centros educativos remiten al Ayuntamiento informes mensuales de control del absentismo escolar en sus aulas.