Aficionados al cine de Lekeitio captan socios para reanudar las proyecciones

Aficionados al cine de Lekeitio han comenzado una campaña de captación de socios con el objetivo de reanudar las proyecciones de películas comerciales en la sala Ikusgarri, suspendidas desde finales del pasado mes de julio. La recogida de adhesiones se celebrará todos los sábados de este mes con la colocación de una mesa informativa en el Eskolape, uno de los puntos neurálgicos del municipio.

Los promotores de la iniciativa persiguen reunir como mínimo a 250 personas interesadas en formar parte del colectivo. «Sin esa cifra, no podemos acudir a ninguna entidad o institución pública en demanda de ayuda y en caso contrario resultará muy difícil por no decir casi imposible reanudar las proyecciones de cine comercial», explican.

El sistema de funcionamiento planificado en las reuniones celebradas desde la clausura de la única sala de cine de la localidad contempla el pago de una cuota anual de cien euros en concepto de socio. A cambio, los titulares de la tarjeta tendrán la opción de asistir a la proyección de toda la cartelera que se emitirá a lo largo de todo el año. «Cada carné dará opción a una sola entrada aunque cuando se trate de películas infantiles los niños podrán entrar con la de sus padres», avanzan.

Apoyo del Consistorio

Los interesados podrán facilitar sus datos personales en el punto de información que se activará a partir de este sábado. Además de una dirección de correo electrónica será necesario proporcionar un número de teléfono de contacto. «También se les facilitará si lo prefieren las direcciones a las que pueden enviar su solicitud», añadieron.

Desde el Consistorio, por su parte, han mostrado en reiteradas ocasiones su inclinación a favorecer y colaborar con aquellas propuestas que permitan recuperar una de las ofertas de ocio existentes en el municipio hasta el pasado verano. De momento, el Ayuntamiento se ha asegurado el uso de la sala polivalente hast,a al menos 2017, aunque se podrá prorrogar si llegan a un acuerdo con la parroquia, titular del edificio.

A partir de ahora, la utilización del espacio Ikusgarri exigirá a las arcas municipales un desembolso mensual de 500 euros, además del IVA y de los gastos que se deriven de su mantenimiento.