Romina Belluscio: «Guti no irá al sofá aunque me ponga un 1»

Romina Belluscio ( San Miguel de Tucumán, Argentina, 1979) amenaza con disputarle la gloria a Falete. Mañana se tirará desde el trampolín de 'Splash!' (22.30 horas, en Antena 3) y abajo le esperará su novio, Guti, que juzgará el salto. La periodista y modelo se dio a conocer en televisión con Florentino Fernández y su programa 'Tonterías las justas' (Cuatro) y luego se pasó a la competencia para acompañar a Susanna Griso en 'Espejo público' (Antena 3). Un mes después de dar a luz a su hijo Enzo, Belluscio se enfrenta a uno de sus mayores retos: las alturas. «Antes de saltar tendré que hacer un trabajo de relajación importante».

- Toca duelo de guapos. ¿Se le dará mejor que a Darek?

- (Risas) No lo sé. Yo creo que él lo hace muy bien, pero solo le he visto entrenar. Todos sorprenderán porque hay saltos muy buenos. La gala va a estar muy entretenida y promete.

- ¿Superará el salto de Daniela Blume?

- Uff... No creo, yo tengo muchísimo vértigo. Para mí el reto será hacer el salto, con eso ya tendré muchísimo. Lo primero es superarme a mí misma y mis miedos, no ganar a mis compañeros. Ellos son unos 'cracks'. Estoy sufriendo hasta el último momento porque ¡me da pánico! Tengo que hacer un trabajo de relajación importante.

- ¿Se ha recuperado totalmente del embarazo?

- Cuando me propusieron participar estaba todavía embarazada y creo que me apresuré demasiado. El mayor problema que he tenido fue que no podía hacer mucho esfuerzo con la espalda ni con la barriga. Me dieron el alta no hace mucho y he hecho todo lo que he podido dentro de las limitaciones que tenía por mi estado.

- ¿Y de moratones cómo anda?

- ¡Tengo muchos! Menos mal que tengo buena circulación y no he sufrido tanto como el resto (risas). Pero me he llevado cabezazos y muchos golpes.

- ¿Ha visto ya los saltos de la competencia?

- No he tenido la oportunidad. Estoy muy liada con mi niño y no tengo mucha oportunidad de ver la televisión.

- Tras su salto, ¿veremos un beso como el de Jesulín y su mujer?

- No. En el programa cada uno sabe cuál es su lugar.

- ¿La valoración de Guti podría desencadenar un conflicto familiar?

- ¡Para nada! Él ya sabe perfectamente que si me lo merezco puede ponerme un 1, que no dormirá en el sofá (risas). Nuestra vida volverá a la normalidad cuando salgamos del programa. Además, cuando acabo los entrenamientos nunca hablamos de esto.

- ¿Sus compañeros creen que su pareja le favorecerá?

- No lo sé, y si lo piensan nunca me lo han dicho. En el grupo tenemos buen rollo, siempre nos hemos apoyado cuando hemos visto que hay alguien dudando o sufriendo en el trampolín. Siempre nos estamos animando y tampoco creo que sea rival para muchos de ellos.

«No luciré biquini»

- ¿Son nuestros Beckham?

- (Risas) ¡Para nada! Soy muy humilde y creo que los dos somos muy normales.

- ¿A quién le propusieron primero el programa?

- Nos llegó por vías diferentes. A mí me lo dijo mi representante y se negoció por separado. Sabíamos que contaban con los dos para el proyecto y cada uno lo decidió por su lado.

- ¿Cuántos biquinis se ha llevado al entrenamiento?

- Ninguno, me los daban todos allí. Además, por orden médica he tenido que entrenar con un traje de neopreno, por eso de proteger el abdomen de los golpes. Así que yo no luciré biquini. Todavía no tengo nada claro que vaya a poder superar el vértigo. Pero bueno, le echaré ganas al asunto. A ver qué tal sale.