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FÉLIX DOMÍNGUEZ
Domingo, 6 de enero 2013, 03:13
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No llevan en funcionamiento ni un año y ya se han hecho acreedores de varias distinciones por su buen hacer. Los responsables de las casas rurales Riojania, situadas en la localidad de Munilla, Esther Lorente e Ignacio Fernández, son un matrimonio que lleva alrededor de una década tratando de poner en marcha este proyecto.
Ahora, cuando se está a punto de cumplir el primer año de vida comercial de sus dos primeras casas, se encuentran con que, a través de la declaración de la Fundación Entorno del Consejo Empresarial Español para el Desarrollo Sostenible, ven cómo su marca está junto a empresas de la talla de Roca, Endesa o Acciona, por su comprobada eficiencia energética.
AcciónCO2 es un proyecto de la citada Fundación desde donde se audita y pone de manifiesto el compromiso y las acciones realizadas por las empresas firmantes como ejemplos a seguir en la reducción voluntaria de emisión y la preocupación por el cambio climático.
Para ello, los responsables de Riojania han tenido que demostrar a los auditores que «nuestra política de respeto ambiental se ha visto reflejada en nuestras actuaciones», explica Lorente. En este sentido, con el objetivo de reducir el consumo energético en cuanto a iluminación, «hemos instalado lámparas de bajo consumo, se ha aumentado el número de interruptores para facilitar el apagado de luces interiores y exteriores, utilizamos lámparas led en los jardines y aprovechamos la luz solar instalando dobles puertas acristaladas».
En este aspecto de la climatización, además de las dobles puertas, «se utilizan cristales con aislamiento térmico y persianas, termostatos para mantener la temperatura en los límites de confort y se han cambiado los radiadores eléctricos por emisores térmicos de calor azul».
Asimismo, los climatizadores son bombas de calor de tecnología inverter, y «tenemos instaladas mosquiteras en las ventanas que permiten mantenerlas abiertas, lo que permite el refrigerio de las instalaciones sin tener que recurrir al aire acondicionado, mientras que la utilización de estores y persianas reducen el nivel de insolación interior», señala la responsable.
En cuanto a la calefacción, Lorente destaca que «tanto para la climatización de los interiores como para el calentamiento del agua del jacuzzi se utilizan calderas de biomasa, que se surten de los sobrantes de podas y talas de los bosques cercanos, es decir, como se ha venido haciendo en el medio rural desde siempre». También la ducha exterior situada en el jardín se sirve de un sistema de calentamiento a través de la energía solar, además de disponer de hornos para asar en el exterior de las casas, cuyo combustible es la biomasa de la que hablábamos», completaba la dueña de Riojania.
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