Monti se presenta como «alternativa» a los partidos tradicionales

El primer ministro italiano saliente, Mario Monti, presentó ayer a los italianos su propuesta electoral para «cambiar Italia», «un movimiento cívico y responsable» que, según él, no puede encasillarse en el «centro» del espectro político pero que es una «alternativa» a los partidos tradicionales. En un artículo publicado en su cuenta de Twitter, Monti explica que él y quienes le apoyan han decidido «dar a los italianos la posibilidad de votar a una formación política distinta» de las que han copado la política italiana en los últimos 20 años.

Se trata de «un movimiento» que nace de «la unión entre el asociacionismo cívico» y «la política más responsable» y que «toma el testigo de la experiencia» del Gobierno Monti para «seguir su trabajo (...) hacia un objetivo de crecimiento sostenible y empleo». Esta «nueva oferta política» «no pretende situarse 'en el centro' entre una derecha y una izquierda ya superadas, sino constituirse en un elemento de impulso para transformar Italia». «Esta nueva fuerza política será ciertamente moderada en su tono, pero no en el programa que perseguirá, que se caracteriza por lo incisivo de las reformas que pretende llevar a cabo», subraya el artículo. Por otra parte, aclara que su movimiento tendrá un carácter laico y plural.

El movimiento «nace con la ambición de conseguir el respaldo de la mayoría de los italianos» y como «respuesta» a aquellos electores que no encuentran en las fuerzas políticas actuales una «respuesta que satisfaga su deseo de rescatar al país y anclarlo de forma segura en Europa». Así las cosas, Monti señala que buscarán «la convergencia con las fuerzas políticas que adopten una línea de acción compatible con nuestra estrategia europea, también en el objetivo de marginar el populismo antieuropeo que está creciendo en Italia de forma preocupante».

El enfado de Berlusconi

Para no variar, 'Il Cavaliere' empezó el año arremetiendo contra el primer ministro saliente en una emisora de radio. «Mario Monti será uno de tantos líderes o lidercillos que llenan el terreno de la política», dijo. A su juicio, para que «se pueda salvar a Italia, deben darse algunas condiciones». «La primera es que uno de los dos grandes partidos de izquierda o de centro-derecha tenga la mayoría en el Parlamento y no deba por ello apoyarse o discutir nada con los partidos pequeños», zanjó el magnate.

El Partido Democrático, según los sondeos, logrará una cómoda victoria en la Cámara de Diputados pero el sistema de voto en Italia hace más complicado que se imponga en la votación en el Senado, de ahí el que se considere que un apoyo del movimiento de Monti en la Cámara Alta sería vital para el futuro Gobierno encabezado por este partido tras las elecciones del 24 y 25 de febrero.