Tras el rastro del ADN de Urdaibai

Conocer las raíces de los actuales habitantes de Urdaibai. Ese es el objetivo del estudio genético que diversos expertos desarrollarán próximamente entre la población de Busturialdea para determinar si son los descendientes de los restos óseos de más de 4.000 años encontrados en la Cueva de Santimamiñe, en Kortezubi. Es decir, si perdura el ADN del 'homo sapiens' que habitó la zona.

Para ello recopilarán un centenar de muestras de saliva de los vecinos para extraer el genoma. «Sólo podemos estudiar y comparar el linaje de las mujeres que se transmite entre ellas porque de momento es lo que nos permite los avances tecnológicos. Buscaremos a la madre de la madre hasta dar con la madre de todas», apuntó la coordinadora del proyecto, Marian Martínez de Pancorbo.

La investigación se centra en la comarca porque existen muchas probabilidades de que haya una alta concentración de linajes antiguos. «Hay un idioma característico y unos apellidos originarios de la zona que nos predicen que generaciones pasadas vivieron aquí, pero no sabemos desde cuando», detalló. Kortezubi, Nabarniz, Ereño y Gautegiz Arteaga serán los municipios participantes en la iniciativa. La convocatoria, sin embargo, está abierta a todos aquellos residentes que deseen conocer a qué época se remontan sus ancestros.

Los voluntarios podrán acercarse el próximo 6 de mayo hasta la casa de cultura de cualquiera de los cuatro municipios participantes en el proyecto para la recogida de muestras. Asimismo, deberán rellenar un cuestionario con los datos genealógicos. Los resultados del muestreo se darán a conocer en el plazo de tres meses. Los arqueólogos guardan los genes extraídos de restos óseos de la Cueva de Santimamiñe en los laboratorios de la Universidad del País Vasco en Vitoria, fruto de algo más de dos años de estudio. «Es muy difícil obtener estas secuencias al ser tan antiguas, pero al final hemos rescatado extractos muy pequeños, pero sin contaminación alguna», puntualizó.

Una de las más antiguas

Gracias al ADN analizado «podremos determinar, además del origen, si nuestros antepasados padecían, por ejemplo, intolerancia a la lactosa. No podemos dar con todos los datos que nos gustaría porque todavía tenemos limitaciones, pero en un futuro quién sabe, por eso recogeremos toda la información posible para generaciones venideras», añadió. De hecho, uno de los campos de acción de los científicos actualmente se centra en determinar de dónde surgen las poblaciones y sus movimientos migratorios.

«La vasca es una de las más antiguas y fue la fundadora del oeste europeo. Por eso nos resulta tan interesante a los genetistas», manifestó. Los detalles de la investigación se abordarán en una conferencia que tendrá lugar el próximo día 2 en el Elai-Alai aretoa de Gernika (20.00) con el titulado 'En busca de los linajes de ADN de Santimamiñe en la población actual de Busturialdea'.