El Sestao cede con los deberes hechos

Un comienzo adverso dio al traste con los planes del Sestao River en Aranda de Duero. La derrota ante la Arandina impidió al conjunto de Félix Sarriugarte completar una semana redonda en la que ha certificado la permanencia en la categoría, su objetivo prioritario para esta campaña plena de cambios en la entidad de Las Llanas.

Las victorias ante Real Unión de Irún y Alavés daban al conjunto verdinegro seis puntos que valían una temporada. La visita al conjunto castellano era, por tanto, un mero trámite para saber si los sestaotarras eran capaces de engancharse al tren de aspirantes al ascenso o, por el contrario, debían pensar en objetivos menos exigentes en las jornadas que restan para el final de esta liga.

La ambición del Sestao en El Montecillo era conseguir un resultado positivo, pero se encontró con un gol madrugador de un rival que se jugaba la vida en la categoría. Disputar los partidos con el marcador en contra no ha sido esta temporada una de las mejores virtudes de los hombres de Sarriugarte y, aunque lo intentaron por todos los medios, no se sienten cómodos en esas situaciones.

En tierras castellanas al Sestao le faltó tiempo. El River encajó dos goles y solamente pudo recortar uno. Tuvo a su rival contra las cuerdas, le obligó a cambiar su habitual forma de jugar, le ahogó con su presión, pero no tuvo el acierto necesario como para completar la remontada. Tampoco el premio de al menos haber sumado un punto, lo que hubiera hecho justicia al empeño demostrado por los verdinegros.

A partir de ahora entran en juego la cabeza y el corazón. Restan siete jornadas para el final de la temporada. Quedan, por tanto, veintiún puntos en juego todavía. Mucha liga. Habrá que ver si el equipo, una vez consumado el objetivo prioritario marcado al comienzo de la campaña, se deja llevar hasta el final o, por el contrario, demuestra la suficiente fortaleza mental y física como para marcarse nuevos horizontes.

Entre los seis primeros

El presidente de Sestao River, Pedro Mansilla, arenga a su equipo para que realice un poco más de esfuerzo al objeto de «conseguir una plaza para disputar la próxima edición de la Copa del Rey. Terminar entre lo seis primeros tiene que ser nuestra meta», señala el dirigente verdinegro. Más complicado ve colarse en el grupo de los cuatro elegidos para disputar la promoción de ascenso. «Si hubiéramos ganado en Aranda hubiese sido posible porque los de arriba pincharon. El play off está ahora más complicado», lamentó.

De las siete jornadas que restan para la conclusión de la temporada, el Sestao River jugará cuatro como anfitrión y tres como visitante. Así, recibirá en Las Llanas, donde se ha mostrado intratable, a Guijuelo, Gimnástica Segoviana, Palencia y Eibar, mientras que deberá visitar a Zamora, Amorebieta y Bilbao Athletic.

La plantilla verdinegra llega un poco justa a la recta final de la liga. Las lesiones y la acumulación de amonestaciones restarán potencial al equipo. A pesar de todo, Pedro Mansilla confía en alcanzar el nuevo objetivo. «Espero que el equipo aguante, porque van a jugar casi todos los jugadores, y creo que, a priori, no tenemos un mal calendario por delante para terminar entre los seis primeros», zanjó.