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M. ARTIME
Viernes, 18 de noviembre 2011, 03:17
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Las tareas de dragado del puerto de Bermeo arrancarán en breve y se prolongarán durante dos meses y medio, aproximadamente. El departamento de Transportes y Obras Públicas del Gobierno vasco ya ha adjudicado los trabajos a la unión temporal de empresas formada por Ciomar, S. L. y Drasemar, S. L. por un presupuesto cercano a los 484.000 euros. El Ejecutivo autónomo también aprovechará la actuación para eliminar un pequeño saliente rocoso que dificulta la navegación y el fondeo junto al muelle de Erroxape, en la dársena comercial, consiguiendo así una mayor funcionalidad en ese área.
«La retirada de lodos se acometerá hasta garantizar los cinco metros de profundidad», detallaron desde la dirección de Puertos. Los estudios previos realizados sobre el fango arenoso acumulado en el área portuaria de la villa marinera prevén la extracción de un volumen de 20.000 metros cúbicos de restos, aproximadamente, que serán posteriormente tratados, según marca la ley en función de sus características.
A la hora de ejecutar los trabajos, el Ejecutivo autónomo ha valorado la menor afección posible a la doble actividad diaria -pesquera y comercial- de la dársena bermeotarra. «En Erroxape se retirarán alrededor de 225 metros cúbicos de roca», añadieron. Precisamente, la actuación en el dique que alberga a las firmas consignatarias mejorará la operatividad garantizando el atraque de los buques de mayores dimensiones.
Plurianual
«Ahora, debido a ese saliente rocoso, los mercantes que tienen más de cinco metros de calado tienen que esperar hasta que la marea les permita efectuar una maniobra de atraque segura», indicaron las mismas fuentes. La entrada en la dársena comercial para este tipo de buques se limita así a las tres horas anteriores a la pleamar y a las tres posteriores.
El pasado año, precisamente, el tráfico comercial en la villa alcanzó las 254.800 toneladas, un millar menos que el ejercicio anterior. Entre las materias desembarcadas en el puerto de Bermeo destacaron los productos siderúrgicos, bobinas en su mayoría, además de tubos, elementos de construcción y manufacturas de plomo. La mayor parte de los mercantes que tradicionalmente hacen escala en este puerto son de origen británico y ruso. Durante el 2010 recalaron un total de noventa cargueros, tres menos que el año anterior.
La puesta en marcha de estas actuaciones forma parte del plan diseñado por la Dirección de Puertos con el objetivo de aplicar criterios de periodicidad en el dragado de los muelles. «Se trata de establecer un programa de actuación con su correspondiente dotación presupuestaria plurianual que establezca las necesidades y los plazos para acometer la limpieza de fondos de cada uno de los puertos», aseguraron.
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