«Lo ideal sería convivir juntos en todo el parque»

Muchos soltaron ayer la correa de sus perros con una mezcla de satisfacción y tranquilidad, los espacios que han ganado en los parques suponen un pequeño alivio para muchos canes urbanitas y para quienes los sacan a pasear.

«En la ciudad no tienen una vida muy cómoda, por eso es bueno que puedan disfrutar de una zona donde pasarlo bien», dice Silvia mientras da un paseo acompañada de un golden retriever de nombre Nuno. Según ella, pasos como el que ahora ha dado el Ayuntamiento o el que dio Metro Bilbao al permitir perros en sus instalaciones «mejoran la calidad de vida de los animales y de sus amos».

Elena es de la misma opinión. A su juicio, «no es cuestión de gustos: los perros necesitan estar sueltos». Cada día sale con Sasta y Oker a dar una vuelta por el parque y, aunque se muestra contenta con el avance conseguido, cree que «lo ideal sería que conviviéramos juntos en todo el parque, y que en el mismo espacio pudieran estar niños, ancianos, perros&hellip ¡todos!».

Jon, que pasea con Zartxul, un leonberger de grandes dimensiones, cree que la convivencia entre animales y personas «no depende de los perros ni de las razas, sino de la educación que les han impartido los dueños».