Familiares y amigos recuerdan a Caballero y Giménez Abad, asesinados por ETA

Familiares y amigos recordaron ayer en sendos actos en Pamplona y Jaca a Tomás Caballero y Manuel Giménez Abad, asesinados por ETA tal día como ayer hace doce y nueve años. Caballero era edil de UPN en la capital navarra y Giménez Abad fue el presidente del PP de Aragón. En un responso celebrado en el cementerio de Pamplona, la hija de Caballero quiso dejar «bien claro» que ETA «no logró acabar con todo lo que representaba» su padre. «Hoy somos más los que estamos aquí, llamando asesinos a los que son asesinos y dispuestos a tomar el testigo que nos dejó». Tras afirmar que «seguiremos siempre reivindicando la memoria y la justicia de las víctimas», dijo que, aunque la banda «está más débil», no ve «inminente» el fin de la violencia.

También recordó al edil de UPN el presidente del Congreso, José Bono, quien, en una conferencia sobre los derechos humanos de la Fundación Tomás Caballero, pidió a la izquierda abertzale que sea «valiente» y que diga a sus «colegas» etarras que «son unos asesinos» y los denuncie a la Policía.

«La cara del asesino»

Casi a la misma hora, otro grupo de personas evocaba a Giménez Abad en el cementerio de Jaca. La presidenta del PP aragonés, Luisa Fernanda Rudi, señaló que el recuerdo de su antecesor es «imborrable». Rudi lamentó que, «sorprendentemente, todavía no haya indicios suficientes para que haya un etarra procesado» por su cruel muerte. Y confió en que «más tarde o más temprano conoceremos la cara y los ojos del asesino» y cumplirá «la condena que los tribunales y el Estado de derecho le impongan».