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Un perro de Medical Detection Dogs, en Inglaterra, olfatea una muestra en una prueba para detectar cáncer
Los perros huelen la enfermedad
mundo animal

Los perros huelen la enfermedad

La Guardia Civil ha entrenado a dos labradores que consiguen detectar por el olfato casos de narcolepsia que normalmente tardan años en diagnosticarse

FRANCISCO APAOLAZA

Sábado, 7 de septiembre 2013, 09:31

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Los narcolépticos tardan entre cinco y diez años en saber que padecen esta enfermedad neurológica. Coca y Kun, dos labradores de la Guardia Civil, tardan unos segundos. Estos dos perros han sido entrenados en un programa que ha conseguido formar a canes que detectan a los enfermos a través del olfato. Se calcula que una entre 2.000 personas en España sufre esta patología a grandes rasgos, les deja dormidos en el acto- y es fundamental reconocerla cuanto antes. Así lo confirmó ayer el doctor Luis Domínguez, del Instituto para la Investigación de los Trastornos del Sueño, que se preguntó hace un par de años si los enfermos tenían un olor especial. La respuesta es sí. Se la han dado los perros del Servicio Cinológico de la Guardia Civil, que han sido entrenados en un proyecto de colaboración. Durante meses, estos agentes de detección de explosivos y drogas reentrenados consiguieron reconocer en las ropas de los enfermos algunos agentes químicos propios de los enfermos. No es la primera vez que se demuestra que los perros y su olfato (10.000 veces más desarrollado que el nuestro) pueden ayudar a los doctores. A continuación se relatan algunas de las enfermedades que son capaces de detectar.

Cáncer

Los primeros casos documentados provienen de Inglaterra. Comenzaron cuando una mujer alertó a su médico de que su mascota no paraba de olerle y de señalar con su hocico un lunar en su pierna. Al parecer, había intentado incluso morderlo. Después, el doctor confirmó que se trataba de un melanoma maligno y publicaron un estudio en The Lancet en 1989. En adelante, diversas investigaciones han confirmado que los perros pueden identificar a personas afectadas por tumores en la vejiga, ovarios, piel y pulmón.

Según los expertos, las células cancerígenas producen una basura metabólica diferente a la de las células sanas. Entre esos marcadores hay algunos compuestos volátiles que los animales y su potentísimo sistema olfativo pueden detectar con gran precisión en las heces, la orina o el aliento del enfermo. El reto de la medicina está en saber no sólo si el perro huele el cáncer, si no saber qué es lo que huele exactamente para construir hocicos artificiales que no necesitan entrenamiento y puedan suponer un salto enorme en el diagnóstico.

Chlostridium difficile

Una doctora escuchó a una enfermera holandesa hacer un comentario sobre el olor especial de la diarrea de pacientes afectados por la Chlostridium difficile, una bacteria que cuando está fuera de control produce infecciones en pacientes de hospitalización larga y que deriva generalmente en colitis. Pensaron que si lo podía detectar una enfermera sería pan comido para los perros. Los canes descubrieron 30 casos positivos entre 270 personas. Acertaron en 265 casos.

Hipoglucemia

En España, la fundación Bocalán ha conseguido entrenar perros para que sean capaces de detectar cuándo un enfermo de diabetes va a sufrir un ataque de hipoglucemia y que de esta manera el enfermo pueda inyectarse insulina antes del colapso. Los animales ladran, golpean con la pata o buscan ayuda de los adultos en el caso de los niños. Al parecer, perciben cambios en el sudor que hacen prever un ataque y algunos son capaces de hacerlo aunque estén en otra habitación que el paciente al que acompañan. Los perros son entrenados generalmente con la ropa del paciente sin conocerle.

Epilepsia

Diversos estudios han probado cómo los perros pueden presentir que una persona va a sufrir un ataque epiléptico. Al principio, los investigadores pensaron que se debía a algún cambio electromagnético que se producía en el enfermo, pero la Universidad Estatal de Louisiana, en EE UU, monitorizó dos ataques en los que no había cambios previos en las ondas cerebrales. Una investigación del Hospital Pediátrico de Alberta concluyó que sólo el 15% de los perros tenían esta facultad, pero los que se mostraban hábiles para la tarea presentaban un 80% de acierto. Otros perros han sido entrenados en el Dog Medical Detection de Inglaterra para alertar sobre ataques de narcolepsia y de pacientes con la enfermedad de Addison.

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