«Esto es internet, competir todos contra todos»

Viernes. Una del mediodía. Plaza del Congreso. Una improvisada coral femenina se arranca a cantar sin mucho acierto 'La Macarena'. El animado rumor sube por el frontispicio de la Cámara y se cuela por la ventana del despacho de Zaryn Dentzel (Santa Bárbara, EEUU, 1983).Recostado en un sofá, el fundador y actual comandante en jefe de Tuenti repasa el presente y pasado de la red social. Una historia de siete años largos que recoge en su libro 'El futuro lo decides tú' y que ahora escruta con un refinado español que no merma el áurea californiana incrustada en su ADN.

-Vayamos al final de la película. ¿Cómo se encuentra lo de llevar Tuenti fuera de España?

-Vamos lento, con un producto que tiene que crecer boca a boca y usuario a usuario. No todos los mercados están tan desarrollados como España en el uso de 'smartphones'. Hay países en los que esta adopción es más lenta, hay que ir más con opciones y plataformas porque te encuentras, por ejemplo, con versiones de Blackberry muy antiguas. Todo ello conlleva más desarrollo.

-Sea el país que sea, lo que parece claro es que ahora hay que echar el resto con los 'smartphones'.

-Se ha dado un cambio muy importante. Todos llevamos un teléfono encima siempre, que ahora tiene internet. Al tener todo el rato conexión encima, la pantalla más importante es la del móvil. Pero es más importante que nuestras aplicaciones funcionen bien en ese soporte y por eso el esfuerzo está orientado ahora hacia el móvil. Más aún en nuestro caso, que hemos sacado TuentiMóvil, una operadora virtual, orientada hacia los datos móviles.

-Este cambio trae nuevas oportunidades de negocio pero también amenazas, a veces un tanto imprevistas. Algo así le ocurrió a MSN Messenger cuando aparecieron las redes sociales.

-El mercado cambia siempre. Cuando empezamos a competir con MSN Messenger me di cuenta de que no reaccionaban. Yo me tomé aquello muy a pecho. Hemos hecho una reinvención total de Tuenti . Un cambio de arriba abajo enfatizando todo en la experiencia móvil, en el chat y en la mensajería instantánea.

-Pongamos nombres concretos a esos nuevos rivales...¿WhatsApp? ¿Line?

-Esto es internet, competir todo el mundo contra todo el mundo. Cada uno estamos intentando captar el mayor tiempo posible de los usuarios. Siempre hemos dicho que queremos crear algo que enganche pero hoy en día hay más oportunidades que nunca para escoger aplicaciones. Por eso en Tuenti tenemos que seguir innovando.

-En eso de innovar, también lo intentaron con el alquiler de películas 'online' pero lo dejaron.

-El mundo de los contenidos es complicado. Hay que pagar mucho dinero a los estudios de cine y muchas veces es imposible ofrecer al usuario lo que quiere al precio que quiere. Si te cobro 3 o 4 euros por un alquiler de 24 horas en 'streaming', no lo vas a pagar. En España esto es peor porque hay mucha piratería.Es un mercado muy difícil para cobrar por el contenido.

Privacidad y datos

-Facebook, Google +... ¿Qué es lo que diferencia a Tuenti de otras plataformas?

-Lo que nos ha diferenciado es el enfoque de la privacidad. Hemos creado un entorno en el que el usuario tiene control absoluto sobre sus datos. No indexamos información en Google. El nuestro es un sistema basado en tener amigos, no en tener a todo el mundo como contacto. La propia red está controlada por personas reales y la gestionamos para que sean personas reales las que están ahí. Y creo sinceramente que este planteamiento de la privacidad es el que ha hecho que tengamos unos tiempos de uso altísimos.

-Pero para la publicidad personalizada también necesitan información de los usuarios. ¿Dónde está el límite para usar estos datos?

-Nosotros hacemos publicidad segmentada.Es buena para el anunciante y buena para el usuario. Si eres un chico, te mostramos anuncios pensados para ti y no uno que esté creado para chicas. Si eres mayor, te enseñamos cosas de acuerdo a eso. Utilizamos una pequeña parte de los datos para servir este tipo de publicidad pero nunca vendemos estos datos. Es imposible, nunca lo haremos.