¡¡¡Agua va!!!

2014 se perfila como el año de la vuelta de las grandes epopeyas bíblicas a las salas de cine. Mientras Ridley Scott ultima Exodus para diciembre una película sobre Moisés rodada en Canarias y Almería, el visceral Darren Aronofsky se adelanta con Noé, una nueva visión de la historia del diluvio universal. Russell Crowe encabeza un reparto en el que no faltan nombres conocidos como Jennifer Connelly que ya trabajó con el director en la sobrevalorada Réquiem por un sueño, Anthony Hopkins o Emma Watson.

El director deja claras sus intenciones respecto al filme. «El público puede contar con todos los grandes momentos... el arca, los animales, el primer arco iris, la paloma. Pero espero haberlas reflejado de una manera nueva e inesperada». En vez de repetir lo visto con anterioridad, Aronofsky pretende repasar lo que está escrito en el Génesis y creó un escenario en el que esos milagros podrían suceder. Sobre el relato de Noé existen versiones en clave de comedia, en animación, e incluso hubo un musical de Broadway. «Pero si uno se fija en el texto de la Biblia, hay mucho más que folklore y animales entrando por parejas. Es la historia de diez generaciones de hombres malvados que alcanza su clímax cuando Dios decide que quiere rehacerlo todo. Para mí, se trata de la primera historia sobre el fin del mundo. No quería seguir ciñéndome a los clichés de la cultura popular».

El cineasta neoyorquino quería que su Noé pareciese «fresco, inmediato y real». En su repaso el cineasta olvida esa especie de versión apócrifa que fue la interesante Take Shelter (2011). Al igual que aquella, Noé se centra en las visiones del protagonista y su deseo de proteger a su familia del apocalipsis.

Fascinación

El director de la emotiva El luchador y la pretenciosa Cisne negro estaba fascinado con este personaje bíblico desde su niñez, cuando escribió un poema sobre él para la escuela. En el cine Crowe encarna a Noé, Connelly a su esposa y Hopkins al abuelo de Noé, Matusalén. Logan Lerman (Percy Jackson) encarna a uno de sus hijos y Emma Watson a su nuera.

El texto del Génesis es breve y no contiene apenas diálogos, por lo que Aronofsky y su equipo tuvieron que consultar una gran cantidad de fuentes para desarrollar el argumento e intentaron profundizar en la personalidad y motivaciones de Noé.

Con todo, algunos grupos religiosos no quedaron del todo contentos en los pases de prueba, pero finalmente el estudio dio luz verde a la versión del director. «Me concentré mucho en conseguir que la película llegara por igual a creyentes y no creyentes», zanja el realizador.