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AITOR ALONSO
Miércoles, 11 de septiembre 2013, 09:16
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Si nuestros políticos de cabecera hubieran tenido la ocurrencia de promover la candidatura de Euskadi para los Juegos Olímpicos de 2020 (cosas más extrañas hemos visto), a buen seguro no habrían caído en la divertida fórmula utilizada por la regidora madrileña Ana Botella para promocionar la quietud y la belleza de la plaza Mayor que preside Felipe III a caballo. Un sitio, dijo la regidora en su discurso ante el COI, donde tomarse una relaxing cup of café con leche. Así, en castellano, como si no hubiera café con leche en el resto del mundo.
De seguir su estela, nuestros próceres podrían haber propuesto unos tasty pintxos in the Parte Vieja donostiarra, un amazing chuletón de kilo en cualquier de los buenos asadores de Artxanda, un fresh rodaballo in Getaria y, unas crunchy chuletillas de cordero al sarmiento with a bottle of wine from la Rioja Alavesa en nuestra región vinatera por excelencia. Pero oigan, por qué no también un buen café con leche, que es sin duda una especialidad vasca. Y si no, que se lo pregunten a esos numerosos convecinos que, cuando vuelven de vacaciones, no paran de repetir: Qué ganas tenía de tomar un café aquí.
No es difícil encontrar un puñado de locales en Euskadi donde la experiencia cafetera puede ser tan relaxing o más que en la plaza Mayor de Madrid (donde, todo hay que decirlo, la taza se despacha a tres euritos). Estas son algunas recomendaciones, seguro que en su mayoría más baratas y más acordes a nuestros gustos.
Café Victoria. Vitoria
Un clásico en la plaza de España, el equivalente vitoriano a la Mayor de Madrid. Y más perfecta, pues la plaza alavesa es un cuadrado de lados exactamente iguales. En su acceso desde la Virgen Blanca se encuentra esta histórica cafetería de mobiliario de madera y amplios ventanales, ideales para una tarde de otoño.
Man in the Moon. Vitoria
Local vinculado a la cultura anglosajona en la calle Manuel Iradier, lugar de encuentro de la colonia angloparlante. Sus cómodos sofás con vistas invitan a relajarse y charlar. Como si uno estuviera en un Starbucks, pero con mejor café.
Terraza Cuatro Azules. Vitoria
El tiempo tiene que acompañar, pero una bonita mañana de otoño o invierno, si la temperatura es amable, es una delicia sentarse con el periódico y un café con leche en la terraza del Parque de La Florida de Vitoria. Los niños tienen sitio para jugar y el ambiente es acogedor en este rincón romántico alumbrado en el XIX, con su riachuelo y su bosquecillo. Si el tiempo no acompaña, ver llover o nevar desde los ventanales del hotel NH Canciller Ayal, justo enfrente, es una buena opción.
Café Miramont Bellevue. Biarritz
Un salón de té histórico en el bello enclave de Iparralde; la confitería y restaurante Miramont tiene unas vistas privilegiadas al mar, un nutrido surtido de tés y pastas, una servicial plantilla y unos precios altitos, en consonancia con el marco. La experiencia, con todo, merece la pena.
Cafetería Monterrey. Bilbao
Si hay un clásico en el Ensanche bilbaíno para degustar un café con leche, es el Monterrey. El mejor café de Bilbao, publicitan ufanos. Y no les falta razón, a juicio de muchos. Aromático, sedoso pero intenso, es parada obligada en una mañana de oficina, después de la comida o a media tarde.
Café La Granja. Bilbao
Otro salón que merece una visita sólo por su estética y elegancia más propia de otro tiempo. Sentarse en la Granja a tomar un café siempre ha sido una experiencia agradable, aunque en ocasiones deben convivir a ciertas horas los últimos del café y los primeros de las copas, pues la hostelería hace tiempo que sabe que debe tocar todos los palos posibles para sobrevivir. Hasta un 'talotoki' abre algunas horas por las tardes en un rinconcito. El café y el dulce para acompañarlo saben mejor en estas mesas que han visto mucha historia bilbaína.
Cafetería Toledo. Bilbao
En la gran terraza con vistas al parque de doña Casilda uno puede sentirse ajeno al follón de la aledaña Gran Vía. Buen café y estupendas vistas para un clásico de Bilbao.
Café Bilbao. Bilbao
En la plaza Nueva de la capital vizcaína, el Bilbao es un café de toda la vida donde el producto alcanza una cota de sabor sublime. Los cafeteros lo saben y acuden a él cuando se busca el sabor por encima de otras cosas.
Cafetería Branka. San Sebastián
Si buscas una terraza con increibles vistas a la Bahía de la Concha, la del Branka es una de las opciones que cualquier donostiarra recomendará sin dudarlo. En la zona del Peine del Viento de Chillida, la bahía se muestra como ese marco incomparable que se ha ganado fama internacional. Si el café no emociona, sí lo harán las vistas, así que es una opción segura. Pero San Sebastián ofrece múltiples alternativas: la cafetería del Kursaal en la Zurriola, la terraza de Bokado en el Aquarium, o dos locales con solera en la Avenida de la Libertad: el Avenida XXI y la cafeetría Bay Bay.
Cafetería Los Tamarises. Getxo
Su último lavado de cara le ha puesto un look 'cool' e informal a lo que venía siendo un centro de reunión de la burguesía getxotarra. En plena playa de Ereaga, Los Tamarises es una de las terrazas donde más se puede disfrutar de una tarde de otoño en la zona. Un café, la brisa y a charlar.
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