Cocaína en el supermercado

El empleado de uno de los establecimientos que la cadena de supermercados Lidl tiene en Madrid volcó una caja de plátanos macho -esos grandes y verdes que se cocinan- para dejarlos bien dispuestos y a la venta. Entre la fruta apareció un paquete sospechoso. Como tenía apariencia de droga, los responsables del negocio llamaron a la Policía. Entonces se puso en marcha un operativo que descubrió la presencia de 'bloques' de cocaína en varias cajas de plátanos que ya habían llegado a establecimientos comerciales de la capital española, Cáceres y Plasencia, todos ellos de la misma firma comercial. En total, se hallaron en ellos cien kilos de esta droga.

La partida de fruta había salido de Mercamadrid, el mercado central de abastos de la capital española, y el Cuerpo Nacional de Policía descarta que Lidl esté implicada en el tráfico de estupefacientes. Todo parece apuntar a que una sucesión de despropósitos dejó a su suerte el alijo que, finalmente, salió a la venta y le 'tocó' por casualidad a la multinacional de alimentación.

Antes de que eso ocurriese, la partida de plátanos debió burlar los controles fronterizos y, finalmente, escapar al control de los narcotraficantes. Por razones que se desconocen, los delincuentes o no pudieron recoger la droga, o se confundieron de 'paquete' y ahora estarán en posesión de varios kilos saludables frutas tropicales pero sin rastro de cocaína.

Registros en Euskadi

El descubrimiento se produjo el sábado y hasta ayer se habían localizado cien kilos de droga en diferentes ubicaciones. Sin embargo, la operación policial sigue abierta y se trabaja con la previsión de que pudiesen aparecer más 'ladrillos' de cocaína repartidos en otros supermercados. De hecho, según informaron a EL CORREO portavoces de Lidl, no se descarta que los registros se amplíen durante el día de hoy a los establecimientos de la marca en Euskadi.

En cualquier caso, este suceso en nada afecta a las propiedades de la fruta, ya que la droga se encontraba minuciosamente empaquetada y no entraba en contacto con los plátanos. Aún así, la multinacional ha optado por retirar de la circulación las bananas distribuidas el sábado para evitar cualquier temor o recelo por parte de los consumidores finales.

De manera paralela al rastreo de más cajas que pudiesen contener droga -los agentes llevaron perros a Mercamadrid por si hubiese más paquetes-, el Cuerpo Nacional de Policía investiga cuál era la procedencia de la carga y su destino. No se trata de la primera vez que los 'narcos' utilizan los plátanos para hacer llegar droga a España: el pasado 14 de diciembre ocurrió lo mismo con un cargamento que llegó al puerto valenciano de Sagunto. En él iban ocultos 228 kilos de 'coca' procedentes de Ecuador.