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perdieron «agilidad» en los trámites. / IGOR AIZPURU
ÁLAVA

150.000 euros a la basura

La Policía Local recupera su viejo sistema informático para recoger denuncias tras comprobar el «fracaso» del adquirido en 2007

MARÍA REGO

Viernes, 2 de octubre 2009, 04:45

Los vitorianos que acudían hasta hace un mes a la Policía Local para presentar una denuncia entraban en la comisaría con un disgusto y salían con dos. Al otro lado del mostrador, idénticas caras de pocos amigos. El culpable de tantos enfados se llama Gespol, un sistema informático utilizado en la Inspección de Guardia para la recogida de denuncias, entre otros trámites, que parece haber logrado sacar de sus casillas hasta el más paciente. «Ha sido un total fracaso», recalca Amparo Cano, coordinadora general del Sindicato Vasco de Policía y Emergencias.

El programa, una tecnología punta que se utiliza en otras localidades como la vizcaína Lekeitio, fue instalado en la Guardia Urbana a mediados del año 2007 y costó entonces cerca de 150.000 euros a las arcas municipales. Sin embargo, no ha habido tiempo suficiente para amortizar el desembolso. La sucesión de problemas que ha generado Gespol en sus dos escasos cursos de funcionamiento ha obligado a la jefatura policial a volver al sistema anterior. «Se llegaba a tardar una hora en recoger una denuncia un poco larga», recuerda Cano, satisfecha por la recuperación de la vieja herramienta.

«Tardaba demasiado»

La lentitud del nuevo programa informático centraba precisamente la mayoría de las quejas de los agentes, que se habían acostumbrado hasta entonces a realizar los trámites en apenas diez minutos. El sistema anterior, operativo de nuevo desde hace un mes, mostraba una especie de «plantilla» en la pantalla del ordenador del policía, que tan sólo debía rellenar unos huecos en blanco con los datos aportados por el ciudadano para pasar después a recoger el texto de su denuncia. En cambio, Gespol obligaba a completar «mucho fichero» -había que abrir una ventana diferente para cada información del denunciante- antes de llegar al relato de los hechos. «Se tardaba demasiado», resume la coordinadora de SVPE.

La Guardia Urbana contó incluso con «la visita de un experto» en informática que pudo comprobar 'in situ' las «complicaciones» de Gespol. La costosa herramienta consiguió también acabar con la paciencia de varios vitorianos. «Si llegaban con un poco de prisa se iban de la comisaría sin poner la denuncia» tras observar el tiempo que invertía el policía en llevar a cabo cada paso. «Al final, el primer perjudicado es el ciudadano», recalca Cano, que tampoco olvida la «poca gente» destinada a la recogida de denuncias. «Están hasta arriba», añade.

El equipo de gobierno eludió comentar la retirada del sistema.

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