La disolución del Parlamento el lunes inicia el proceso

Las elecciones autonómicas del 1 de marzo serán las novenas desde la restauración de la democracia que se celebran en el País Vasco. Tres han sido, hasta ahora, los lehendakaris: Carlos Garaikoetxea, José Antonio Ardanza y Juan José Ibarretxe, todos ellos del PNV. La nueva cita con las urnas, que tendrá lugar en apenas dos meses, será la cuarta ocasión en la que Ibarretxe opte a la presidencia del Ejecutivo de Euskadi, en un año en el que la mayoría de las encuestas reflejan un empate técnico entre el candidato jeltzale y el representante del PSE, Patxi López.

El anuncio oficial de la cita electoral protagonizado ayer por el lehendakari, que se adelanta mes y medio con respecto al final de la legislatura y coincide con los comicios gallegos -la anterior convocatoria fue el 17 de abril de 2005-, dará paso el próximo lunes a la firma del decreto de convocatoria de elecciones y, por ende, de disolución del Parlamento vasco. El dictamen aparecerá publicado veinticuatro horas después en el Boletín Oficial del País Vasco. Euskadi iniciará entonces la recta final hacia los comicios. La presentación de candidaturas tendrá lugar el 2 de febrero y la campaña se desarrollará entre los días 13 y el 27 del mismo mes. La proclamación oficial de los resultados no será hasta el 11 de marzo, diez días después de que los ciudadanos depositen sus votos en las urnas.

Escaños y votos

La fecha en la que se nombrará oficialmente al futuro lehendakari será por ahora una incógnita, ya que no hay un plazo para que la Cámara de Vitoria fije la investidura del jefe del Ejecutivo. Si alguno de los aspirantes obtiene la mayoría absoluta en la primera votación que se celebre en el pleno, asumirá el cargo. En caso contrario, la sesión de repetirá al día siguiente y será designado finalmente el que más votos obtenga. En 2001, por ejemplo, Ibarretxe asumió la Lehendakaritza dos meses después de celebradas las elecciones.

En todas las convocatorias celebradas hasta la fecha, el PNV ha sido el partido que ha logrado el mayor número de escaños, excepto en 1986. Los socialistas obtuvieron en dicho año un total de 19 parlamentarios, frente a los 17 de la formación jeltzale, que sí ganó, no obstante, en votos. El PSE cedió entonces la Lehendakaritza a los nacionalistas. En 2005, el escenario político fue bien distinto. La coalición PNV-EA obtuvo 29 escaños (22 de los jeltzales y 7 de Eusko Alkartasuna); el PSE logró 18; el PP, 15; EHAK, 9; EB, 3 y Aralar, uno.

Si algo ha caracterizado también a los dos últimos comicios autonómicos vascos ha sido la coalición formada entre PNV y Eusko Alkartasuna. Los jeltzales optaron por presentarse en solitario a todas las elecciones, hasta que en 2001 sellaron su primer pacto con la formación que preside en la actualidad Unai Ziarreta, un acuerdo defendido a ultranza por Ibarretxe, que volvió a hacerse efectivo cuatro años después. Pero el 'idilio' político que ambas formaciones han vivido durante las últimas dos legislaturas llegó a su fin el pasado 10 de noviembre. Ziarreta anunció entonces que EA concurrirá en solitario a los comicios del 1 de marzo, aunque no cerró la puerta a una posible reedición del tripartito -junto a Ezker Batua- en el seno del Gobierno vasco, si los resultados, eso sí, lo avalan.